Es la primera vez que el "Internacional Blind Challenge Cup" se realiza en Alemania, en donde no hay un equipo de fútbol de invidentes.

El gol de la victoria para España fue anotado por Marcelo Rosado Rodríguez. Además del campeón mundial Brasil y el campeón europeo España, participaron en el torno Francia, vicecampeón europeo, y la selección inglesa.

Alemania no cuenta con un equipo de fútbol de invidentes, pero animados por el actual torneo la Asociación de Invidentes de Alemania se ha propuesto crear en el plazo de dos años un equipo femenino y uno masculino.

Una pelota sonora

El deporte, poco conocido, se juega en una cancha del tamaño de un campo de tenis rodeado de bandas acolchonadas. Los equipos están formados por sólo cuatro jugadores invidentes y un portero vidente. Puesto que no todos han perdido por completo la vista, todos, menos el portero, tienen los ojos vendados para garantizar el "fair play".

Para que no todos luchen al mismo tiempo por la pelota sonora, llena de cascabeles, existen reglas estrictas de juego. Cuando los jugadores escuchan a uno de los otros futbolistas acercarse con la pelota deben gritar "voy" para alertar que van a luchar por la pelota.

50 minutos de juego

En los 50 minutos que dura el juego, el entrenador guía a sus jugadores con comandos sonoros y claros. Además hay detrás de cada portería un "comandante" que pega contra los postes derecho e izquierdo para dar una señal acústica a los jugadores de donde se encuentra la portería y de sus dimensiones. Este "comandante" también mantiene informados a los jugadores de la posición en la que se encuentra el portero.

El portero es vidente, de lo contrario correría demasiado riesgo. Pero esto no facilita su tarea pues sólo puede moverse dentro de una pequeña área cuadrada y sólo debe utilizar sus manos para parar la pelota.

Prohibido aplaudir

Durante el partido los hinchas deben guardar silencio absoluto, pues los futbolistas deben concentrarse en las voces del entrenador y el "comandante".

El que observa por primera vez un juego de fútbol de invidentes queda impresionado por la "brutalidad" de los encontrones y golpes entre jugadores. Pero los invidentes y sus entrenadores sostienen que se trata de pura ilusión óptica. El contacto corporal entre jugadores se da de forma sensible. Los españoles parecen dominar la materia, como lo han podio demostrar en el campeonato disputado en Berlín.