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España-Grecia 1 a 1: el rey cabecea

pk16 de junio de 2004

Grecia conquistó ante España un tercer punto. ¡Quién lo iba a pensar! El punto le viene al fin de cuentas bien a ambos. Ahora todo se decidirá en el tercer partido. Juan Carlos y Otto, conformes.

Charisteas dispara y empata el partido.Imagen: AP

Un rey español, una reina griega: ¿por quién late el corazón de la Casa Real Española? A juzgar por los cabeceos de sueño de Juan Carlos durante el partido de hoy, el monarca no se cuenta, a diferencia de sus súbditos, entre los más apasionados aficionados del fútbol. O quizás haya querido disimular, para no quedar mal con su esposa...

El disparo de gol de Morientes.Imagen: AP

Monarcas van, monarcas vienen

Otto se llamó el primer rey griego. ¿Un alemán, rey de Grecia? Así es. La historia es la siguiente. Luego del fin de la guerra de independencia griega de 1821 a 1830, contra los turcos, el país se sumió en el caos. Luego de una intervención de Gran Bretaña, Francia y Rusia, Grecia se transformó el 7 de mayo de 1832 en reino independiente. Rey de Grecia fue nombrado Otto I de Baviera, entonces de 16 años. Otto I gobernó de 1832 a 1862. Un nuevo Otto es elevado ahora por los griegos al Olimpo: Otto Rehagel, el entrenador alemán del seleccionado griego que venció a Portugal y empató con España. ¡Viva Otto II!

En su primera participación en la ronda final de una Eurocopa, que fue en 1964, los españoles ganaron, en su propio país, el hasta ahora primer y único título en el torneo de selecciones europeas. Luego tuvieron que esperar hasta 1980 para siquiera participar nuevamente, pero sin mayor fortuna. En el 84, por el contrario, lograron el segundo puesto. En el 88 no pasaron a cuartos de final. Volvieron a participar en 1996 y en el 2000, en que sí llegaron a los cuartos de final. Ésta es su séptima participación. ¿Otro título europeo? Quizás, quizás, quizás...

A no atorarse

Para los griegos, hasta hace poco lo único que contaba en fútbol era el propio club. A la selección nacional se le concedía poco y ningún interés. Pero ahora, después de ganarle a Portugal y empatar con España en la Eurocopa, los aficionados están que se salen de las casillas. Su apetito de victorias es insaciable. Después de registrar que también su seleccionado puede ganarle a cualquiera, se han fijado nuevos objetivos: ahora quieren ser campeones europeos. ¿Lo lograrán? ¿Por qué no? Cualquier otra cosa sería una tragedia griega...

La primera división española es la liga más fuerte del mundo. Ningún otro país envió en los últimos cinco años tantos clubes como España a las finales de la copa europea de equipos. A nivel de seleccionado, sin embargo, todo lo contrario: España no gana título internacional alguno desde hace 40 años. Es tiempo de que gane un torneo.

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