"Con la contención a que nos obliga la historia, vivamos hoy la legítima satisfacción por la victoria de la democracia, de la ley, de la razón. Una satisfacción teñida por el recuerdo inolvidable del dolor causado por una violencia que nunca debió producirse y que no ha de volver jamás", manifestó el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, al valorar el comunicado de ETA.

Zapatero habló de "contención" en la "satisfacción" después de haber abierto en 2006 un proceso de diálogo con ETA y ver cómo el grupo armado rompía luego la tregua decretada matando a dos personas en el aeropuerto de Madrid. Pero fue el presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, el que apuntó directamente el por qué de esa cautela en la celebración de lo que calificó de "gran noticia".

"La tranquilidad sólo será completa cuando se produzca la disolución completa" de ETA, manifestó el político conservador, al que todas las encuestas dan una gran victoria en las elecciones generales del 20 de noviembre en España.

"Sin ningún tipo de concesión política"

Pese a que en su día fue muy crítico con el proceso de diálogo del gobierno de Zapatero con ETA, que generó gran crispación política en España, Rajoy realizó hoy una declaración muy medida tras conversar por teléfono con el propio Zapatero. Y aseguró que el anuncio de la organización armada se produjo "sin ningún tipo de concesión política".

Al igual que el presidente del gobierno, el líder conservador atribuyó el mérito de la decisión de ETA a todos los gobiernos que ha tenido España desde el regreso de la democracia, tanto los del PP como los del Partido Socialista (PSOE).

Por su parte, el candidato socialista a las elecciones generales del 20 de noviembre en España, Alfredo Pérez Rubalcaba, manifestó: "Hoy es un día para celebrar la gran victoria de la democracia". Ministro del Interior desde 2006 hasta hace pocos meses y por lo tanto máximo responsable de la lucha contra ETA, Rubalcaba se mostró visiblemente emocionado. "Ojalá este día hubiese llegado antes", dijo.

También el jefe del gobierno regional del País Vasco, el socialista Patxi López, expresó su alegría desde Estados Unidos, donde estos días realiza un viaje oficial. "Hemos conquistado la paz y la libertad. El comunicado de ETA es la evidencia de que la libertad y la democracia se han impuesto a la barbarie y al totalitarismo", dijo.

"El final de su actividad violenta debe llevar a su desarme y disolución", instó por su parte el Partido Nacionalista Vasco (PNV), que durante 30 años y hasta 2009 gobernó la región del norte de España.

Colectivo de Víctimas: "ETA tiene aún mucha cuerda"

ETA anunció el jueves por la noche (20.10.2011) el "cese definitivo de su actividad armada" y su "compromiso claro, firme y definitivo" de "superar la confrontación armada", pero no su disolución. Y eso hace temer que España no esté ante el final definitivo del terrorismo.

Es lo que creen asociaciones de víctimas del terrorismo etarra, que expresaron además su temor a que el gobierno pueda hacer concesiones al grupo armado si se produce el diálogo que solicita ETA.

"No quiero que el final de ETA sea negociado", dijo la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, que quiere una "derrota total" y "sin condiciones". "ETA tiene aún mucha cuerda", expresó su temor el Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco (Covite).

Ese escepticismo lo expresaron también las fuerzas de seguridad. "Hasta que los terroristas no se pongan a disposición de la Justicia y entreguen las armas, no nos creemos nada", dijo un portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).

La izquierda independentista radical vasca que antaño ejerció de brazo político de ETA pero que desde hace dos años aboga por las vías pacíficas y democráticas no se pronunció hoy, sino que remitió a una rueda de prensa que dará mañana.

dpa
Editor: Pablo Kummetz