Los Gobiernos de España y Costa Rica han reafirmado su voluntad de seguir profundizando en las relaciones bilaterales "en las áreas de acción común" y han rubricado una declaración conjunta con una firme condena a Rusia en la que reclaman el cese de hostilidades contra Ucrania, su soberanía y el legítimo Ejecutivo que encabeza Volodimir Zelenski.

En un comunicado, presidencia del Gobierno indica que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha destacado las "las excelentes relaciones bilaterales" en una reunión con su homólogo de Costa Rica, Carlos Alvarado, que se encuentra en visita oficial en España y que también se ha reunido hoy el rey Felipe VI, que afirmó que "España quiere reubicar a Iberoamérica en la agenda de prioridades de la Unión Europea, y se compromete a hacerlo aprovechando un acontecimiento tan destacable como la presidencia del Consejo de la UE durante el segundo semestre de 2023".

Alvarado aprovechó en un evento para comentar la situación en Managua. "Lo que ocurre en Nicaragua es muy lamentable, cómo las instituciones democráticas progresivamente fueron erosionadas, destruidas; ya eso no tiene ningún rasgo de democracia", sentenció. El presidente costarricense llamó a la comunidad internacional a trabajar para impulsar "un proceso de diálogo y elecciones limpias y transparentes" en Nicaragua, "siempre con el liderazgo de los propios nicaragüenses".

Por otro lado, Alvarado pidió a su sucesor, que saldrá elegido en el balotaje de este domingo entre el conservador Rodrigo Chaves y el liberal José María Figueres, preservar la estabilidad macroeconómica del país, ya que, según él, "estamos devolviendo la casa en orden". También le instó a mantener los avances en materia medioambiental y social, como por ejemplo el matrimonio igualitario o el aborto terapéutico. "Todo ese legado espero que no se eche atrás porque está basado en ciencia", expresó Alvarado.

Alvarado será recibido el martes por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y sostendrá reuniones con empresas para promover la inversión en su país. Su viaje a Europa, posiblemente el último internacional antes de dejar el poder el 8 de mayo, incluye también una escala en Francia. (efe/afp)