¿Está preparada la OTAN para la guerra con drones?
19 de septiembre de 2025
Los drones rusos se han convertido en noticia en Europa durante los últimos días.
En la noche del 9 al 10 de septiembre, una oleada inédita de aeronaves no tripuladas cruzó el espacio aéreo de Polonia. Fueron detectados hasta 19 drones, varios de los cuales fueron derribados.
Apenas unos días después, otros drones rusos atravesaron el territorio de Rumania, también miembro de la OTAN. Y este lunes (15.09.2025), en Varsovia, las autoridades polacas derribaron un dron que sobrevolaba edificios gubernamentales y detuvieron a dos sospechosos: un ciudadano bielorruso y otro ucraniano.
Nadie resultó herido y Moscú insiste en que no se trató de incursiones deliberadas. Aun así, la OTAN reaccionó con el lanzamiento de una nueva misión para reforzar la seguridad en su frontera oriental.
¿Qué es la Operación Eastern Sentry?
Bajo el nombre Eastern Sentry (Centinela del Este), la alianza militar anunció el 12 de septiembre un despliegue "multidominio" que incluye el refuerzo de bases terrestres y defensas aéreas, sin precisar su duración.
El objetivo: enviar un mensaje inequívoco a sus socios del este y también al Kremlin.
El Reino Unido y Dinamarca ya se sumaron a la iniciativa. Alemania duplicó su presencia aérea en Polonia ―pasó de dos a cuatro aviones de combate― y Francia envió cazas Rafale.
Una defensa costosa
Los drones pueden ser interceptados con aviones o misiles aire-aire, pero el problema es el costo.
"Un dron de los que se ven en Ucrania cuesta entre 10.000 y 30.000 euros. Si le disparas un misil de un millón de dólares, te quedas sin arsenal muy rápido", explicó a DW Chris Kremidas-Courtney, experto en defensa del European Policy Centre (Centro Europeo de Políticas): "Es como usar un martillo para clavar un alfiler".
El especialista sugiere que Europa invierta en tecnologías más eficientes y accesibles, como el sistema antidrón sueco Nimbrix. De lo contrario, advierte, la región enfrentará una peligrosa "asimetría de costos".
¿Un "muro de drones" europeo?
Desde hace años, los países bálticos ―que enfrentan regularmente incursiones rusas en su espacio aéreo―, así como Polonia y Finlandia reclaman una defensa coordinada contra los drones. La idea incluso ha sido bautizada como un "muro de drones", un término que retomó recientemente la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
La experiencia ucraniana será clave en este esfuerzo. Bruselas anunció un proyecto conjunto de producción de drones por 6.000 millones de euros.
"Debemos aprender de los ucranianos", subrayó Ian Bond, subdirector del Centro para la Reforma Europea (CER). "Han tenido un éxito notable derribando drones rusos, y si cuentan con la tecnología, Europa tiene que adoptarla".
Señal a Moscú
El almirante Rob Bauer, expresidente del Comité Militar de la OTAN, dijo a DW que el gran desafío será implementar a gran escala estas nuevas tecnologías de defensa. También insistió en la necesidad de un cambio cultural en Europa: "La gente debe entender que existe una amenaza real".
Por su parte, el Kremlin ha repetido que considera a la OTAN en guerra con Rusia. Aunque la OTAN asegura que no es así, Bauer dijo a DW que la Alianza se encuentra "en una zona gris entre la paz y la guerra". Y lanzó un mensaje directo al presidente ruso: "La OTAN responderá, pase lo que pase".
Según el almirante, el derribo de drones en Polonia mostró que las defensas aliadas funcionan: "Pasamos la prueba, pero debemos mejorar para enfrentar estas nuevas amenazas".
¿Está lista la OTAN?
Para Ian Bond, del CER, la respuesta todavía es insuficiente. "Parece que la OTAN no estaba preparada para derribar drones. Tiene que mejorar mucho", dijo a DW.
El analista cree que la organización debe actuar con más determinación y neutralizar drones rusos siempre que sea seguro hacerlo, incluso en el espacio aéreo del oeste de Ucrania.
Sin embargo, no todos los países lo han hecho: Lituania permitió que dos drones rusos cruzaran su territorio en julio, y Rumania optó por no abrir fuego contra otro que luego cambió de rumbo hacia Ucrania.
Bond advierte que esta inacción puede interpretarse en Moscú como una señal alentadora.
Más allá de lo militar
Si bien interceptar drones es clave para defender el espacio aéreo de la OTAN, los expertos también señalan que los Gobiernos deberían pensar en medidas como aplicaciones de alerta de bombardeos y mayor capacidad de refugios.
"Sería un paso inquietante, pero no creo que excesivo", dijo a DW el analista de defensa Ian Bond.
Tanto él como Kremidas-Courtney coinciden en que Rusia seguirá probando la paciencia de los aliados occidentales de Kiev hasta que el costo le resulte demasiado alto.
"Debemos asumir que Rusia intentará esto cada par de semanas, hasta que le hagamos pagar un precio que los lleve a decidir no hacerlo", indicó Kremidas-Courtney
La OTAN espera que la Operación Eastern Sentry logre precisamente eso.
Con la colaboración de Teri Schultz, de DW.
(md/rml)