Como es usual antes de un torneo internacional de fútbol femenino, el interés que este despertó fue limitado. No me malentiendan, fue considerablemente mayor de lo que había sido en el pasado, pero nada en comparación con un torneo masculino.

Y, para ser justos, eso podría haber sido hasta bueno. ¿Por qué? Porque significaba que la Eurocopa 2022 podía pasar inadvertida para luego a dejar a todos boquiabiertos.

Es posible que esto no haya sido una sorpresa para las personas que suelen mirar fútbol femenino, o informar sobre él con regularidad. Pero para aquellos que no lo hacían, lo fue.

Estoy seguro de que muchos de los que vieron, leyeron y escucharon quedaron absolutamente atónitos por la calidad del fútbol que se les presentó.

"¡Son increíbles!"

Este torneo y sus jugadoras cautivaron a los fanáticos y los llevaron en un viaje en la montaña rusa. Ya fueran las finalmente triunfantes "leonas” de Inglaterra al anotar gol tras gol con su fútbol de gran velocidad, que mantenía al fan más neutral al borde de su asiento, o la alemana Alexandra Popp, que a los 31 años hizo su debut en la Eurocopa, después de años de lesiones y reveses, para marcar en todos los partidos, antes de tener que retirarse, por una cruel lesión, minutos antes de la final.

Mi papá, un alemán de unos 70 años que ha sido testigo de una buena cantidad de éxitos de la selección nacional a lo largo de su vida, me envió un mensaje de texto después del segundo gol de Popp contra Francia en la semifinal diciendo: "No recuerdo cuándo celebré por última vez un gol de Alemania así. ¡Ella es increíble! ¡Son increíbles!".

Son historias como las que hemos visto en la Eurocopa 2022 las que capturan los corazones de quienes las ven. Y si estas jugadoras pueden conseguir que un jubilado con las rodillas crujientes y la espalda rígida celebre más de lo que lo ha hecho en años, no hay límite para el papel inspirador que podrían tener en los niños pequeños que también estaban mirando.

Así que no se sorprendan la próxima vez que vea niños jugando al fútbol y los nombres en las camisetas ya no sean Messi, Ronaldo o Neuer, sino Popp, Mead y van Domselaar.

Audiencia y salarios

La Eurocopa 2022 ha registrado un aumento masivo de espectadores, no solo en los estadios, donde se batió récord tras récord, sino también desde la comodidad de los sofás y las pantallas de televisión en los hogares. Casi 18 millones de personas vieron a Inglaterra vencer a Alemania en la final, una participación de mercado del 65% por la noche. Algo increíble.

Algo desafortunado fue que la final no estuviera programada para el horario de máxima audiencia televisiva, y que haya tenido que competir con el fútbol masculino, que comenzó antes de lo habitual debido a la Copa del Mundo masculina en Qatar, en noviembre; pero ese es un problema en sí mismo. Por el otro lado, la Eurocopa 2022 no tuvo que competir con una Copa del Mundo masculina de verano.

No obstante, el próximo paso debe ser capitalizar este éxito y realizar cambios fundamentales.

La directora técnica de Alemania, Martina Voss-Tecklenburg, lo tiene claro: "Queremos más igualdad de talento, mejores estadios, queremos conseguir más espectadores, queremos más tiempo en televisión, mejores horarios de inicio". Temas como las instalaciones y las estructuras salariales también deben abordarse.

¿Hacia dónde a partir de ahora?

Siempre habrá gente que, por una u otra razón, está en contra del fútbol femenino, y nada hará que cambie de opinión, lo cual es una verdadera vergüenza para ellos, porque no saben lo que se pierden: alta energía, juegos llenos de acción y emoción pura.

Este es un parteaguas para el fútbol jugado por mujeres. La temporada nacional comienza el mes próximo, y pronto seguirá la Liga de Campeones, antes de que todo termine, con la Copa del Mundo 2023, en Australia y Nueva Zelanda. ¡Ya no puedo esperar!

(cp/ers)