1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Europa debe valerse por sí misma

2 de diciembre de 2022

Joe Biden no cede: durante la visita de presidente francés, dejó en claro que Europa debe ocuparse de su propia transición a la economía verde. Ines Pohl opina sobre el tema.

Emmanuel Macron y Joe Biden en Washington.
Emmanuel Macron y Joe Biden en Washington.Imagen: Jim Watson/AP/picture alliance

Se suponía que la primera cena oficial ofrecida por el presidente estadounidense, Joe Biden, iba a ser un banquete de paz. Una especie de forma de pedir disculpas por las fallas de comunicación en el negocio de submarinos con Australia, que pilló desprevenida a Francia y costó cientos de puestos de trabajo que se creían seguros y millones de euros. Reconciliación a la luz de las velas. Como ocurre también entre buenos amigos, en la vida real.

Pero no se percibió mucho ánimo de disculpas, pese a los demostrativos gestos de cordial amistad. Macron no solo había sido invitado como presidente de Francia, sino como representante de toda la Unión Europea. Porque la UE está bastante asustada por la ley conocida como "Inflation Reduction Act", que conlleva un financiamiento de 360 mil millones de dólares. Con ella, Estados Unidos ha dado una clara señal en materia de protección climática. Las empresas "verdes” del ámbito de la energía, el transporte o el hidrógeno pueden esperar recibir cuantiosas subvenciones. Hasta ahí, todo está bien. El problema, desde el punto de vista europeo, es que los bienes deben ser producidos en Estados Unidos, lo que vale para prácticamente todas las etapas de la producción: desde la obtención de materias primas hasta el reciclado, pasando por el montaje y los productos intermedios.

El fantasma de la guerra comercial

Rápidamente los europeos comenzaron a hablar de guerra comercial y de un poco elegante proteccionismo estadounidense. Un debate que el presidente Biden ignoró. Durante la conferencia de prensa conjunta, solo deslizó de refilón que no existe un tratado comercial con Europa (el TTIP fracasó en su día). Y que él, a diferencia de lo ocurrido con el mal realizado negocio de los submarinos, no piensa disculparse en modo alguno.

"Europa puede hacer eso también. Y Europa debe batirse por sí misma". ¡Bum!

Ines Pohl.Imagen: DW/P. Böll

Ese es el mensaje que el presidente Macron trae de regreso a Europa. Los europeos deben hacer sus propias tareas, poner dinero a disposición para crear puestos de trabajo "verdes”. No, no habrá capítulos especiales para Europa en el paquete de inversiones de Biden, por el que peleó tan duro en casa. En cambio, habrá un grupo de trabajo. Aunque habrá más conversaciones y ambos presidentes se mostraron optimistas, no podrán evitar las fricciones. Cada puesto de trabajo se genera una sola vez, a uno u otro lado del Atlántico.

Prolongación del "America first”

Por otra parte, a diferencia de su antecesor, Biden está firmemente de parte de la OTAN. También durante esta visita se afirmó reiteradamente, que ante la agresión bélica de Rusia, se trata de defender los valores occidentales. Pero, cuando se trata de política económica, Biden continúa con la línea de "America first" de Trump. No solo en lo tocante a las energías renovables sino también en lo que respecta a una futura independencia de otros países. Por ejemplo, de China, en cuanto a la industria de chips.

Biden es un gran defensor de los lazos transatlánticos, el último de esta especie. Macron y toda Europa lo saben. Pero también saben que, tratándose de la economía, para él su país es lo primero. Europa debe entenderlo de una vez por todas. Muchos son los culpables de que la nueva era verde de la industria automotriz parezca iniciarse en Estados Unidos y no en Europa. No es algo que se le pueda reprochar a Joe Biden.

(ers/jov)

Ir a la siguiente sección Descubra más