Exlíder FARC se declara culpable de narcotráfico en N. York
15 de agosto de 2023
Martín Leonel Pérez Castro, alias "Richard", excomandante del 30º Frente de las FARC, podría enfrentar cadena perpetua en Estados Unidos.
Publicidad
El colombiano Martín Leonel Pérez Castro, alias "Richard", un excomandante del Frente 30 de las FARC, se declaró culpable el lunes (14.08.2023) en una corte de Nueva York de conspirar para introducir más de 75 toneladas de cocaína a Estados Unidos.
Pérez Castro, de 53 años, extraditado a Nueva York en junio de 2022, se arriesga a la cadena perpetua cuando sea sentenciado por el juez Brian Cogan, de la corte federal del distrito Este de Nueva York.
"El acusado era un alto dirigente de las FARC que financió la violencia y el terrorismo del grupo a través de la producción y distribución de miles de kilogramos de cocaína a escala mundial", indicó en un comunicado el fiscal federal Breon Peace.
"Su declaración de culpabilidad es un poderoso recordatorio para las organizaciones narcotraficantes de todo el mundo que esta oficina y nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley los llevarán ante la justicia por el daño y la miseria que han causado en los Estados Unidos y en otros lugares", afirmó.
De acuerdo con la acusación, bajo el liderazgo de Pérez Castro, el Frente 30 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) generó abundantes ingresos vendiendo cocaína directamente a los narcotraficantes o extorsionando a los traficantes que operaban en su territorio.
Indica además que la cocaína traficada por el Frente, que operaba en el suroeste de Colombia, llegó más tarde a Estados Unidos, Europa y otros lugares.
"Como líder de alto rango de las FARC, Pérez Castro usó la violencia, el poder y la notoriedad para importar toneladas de cocaína de Colombia a Nueva York", indicó en el comunicado Annie Milgram, directora de la DEA.
Pérez Castro fue capturado por la Policía colombiana en 2014 y en 2019 la Justicia Especial para la Paz (JEP) le denegó la garantía de no extradición que había solicitado, al considerar que cometió presuntos crímenes tras dejar las FARC y que, por tanto, no estaba cubierto por las ventajas dadas a miembros de la guerrilla en el marco del Acuerdo de Paz que firmó con el gobierno.
El pasado 8 de agosto, otro narcotraficante colombiano, Dairo Antonio Úsuga, conocido como "Otoniel", fue sentenciado también en esta corte federal a 45 años de prisión tras declararse culpable en enero de liderar la red criminal Clan del Golfo y de conspirar para introducir droga a Estados Unidos.
gs (efe, afp)
Narcocultura en América Latina: de narcotours a narcocementerios
El próspero negocio del narcotráfico ha dejado una huella profunda en las sociedades latinoamericanas. En países como Colombia y México, generaciones de jóvenes imitan el estilo de vida de los grandes capos.
Imagen: Eduardo Verdugo/AP/picture alliance
Los Tigres del Norte
En México, los Tigres del Norte son los principales representantes del género musical de los narcocorridos, que nació en la década de los 70 del siglo XX. Las canciones que narran la vida de los grandes narcotraficantes se remontan a los movimientos revolucionarios, donde trovadores musicales hacían el relato y la crónica de las hazañas de algunos bandidos sociales, dice Hugo Sánchez, de la UNAM.
Imagen: Cristopher Rogel Blanquet/Getty Images
Narcocementerios
La influencia de la estética del narco también ha llegado a los cementerios. En panteones, como Jardines del Humaya, en la ciudad de Culiacán, descansan los restos mortales de grandes figuras de los cárteles de la droga. Impresionantes mausoleos glorifican a los capos, construyendo leyendas.
Imagen: Pedro Parado/AFP/Getty Images
Jesús Malverde
El culto a Jesús Malverde, patrono de los narcotraficantes, se originó en el estado mexicano de Sinaloa, cuna del cártel del mismo nombre. Hoy día, la figura de Malverde es venerada por muchos mexicanos, en todo el país. Xavier Andrade, de la Universidad de los Andes, cuenta que incluso se encuentran estatuillas y estatuas de Malverde en tiendas de mercancías religiosas en Colombia.
Imagen: Eduardo Verdugo/AP/picture alliance
La Santa Muerte
La Santa Muerte es otra figura que surge del entorno del narcotráfico, donde la muerte está siempre presente. Juan Carlos Hayala, de la Universidad Autónoma de Sinaloa, explica que los grupos criminales han incorporado prácticas de la santería, de origen caribeño, a sus rituales religiosos.
Imagen: Pedro Parado/AFP/Getty Images
Souvenirs de Pablo Escobar
En Colombia, es evidente la proliferación de mercancías que aluden a Pablo Escobar. También son muy populares los narcotours y otras formas de consumo en la ciudad de Medellín, como el culto al deporte de stunts en motocicletas, directamente derivados de la afición de Escobar por éstas, y, de su uso extendido en formas del sicariato, explica Xavier Andrade.
Imagen: Joaquin Sarmiento/AFP/Getty Images
Ídolos del siglo XXI
Series como "Narcos", "La Reina del Sur" o "El Señor de los Cielos" son productos de la narcocultura. En Colombia, amplios sectores de la población se sienten atraídos por "la ética hiper capitalista de lo narco y la capacidad de exceso consumista que promueve", indica Andrade.
Imagen: Agencia EFE/imago
Un museo dedicado a Pablo Escobar
En 2019, el alcalde de Medellín ordenó cerrar el museo dedicado a Escobar. Sin embargo, estas medidas no han podido frenar el turismo del narco. Paradójicamente, el Museo de la Policía de Bogotá, que intenta brindar una imagen exitosa de la lucha contra el narcotráfico, es visitado regularmente por turistas que quieren ver los objetos asociados a famosos capos, asegura el académico colombiano.
Imagen: imagebroker/IMAGO
Hacienda Nápoles
En la entrada de la antigua hacienda Nápoles, dos turistas toman fotos de la avioneta con la que Escobar envió el primer cargamento de cocaína a Estados Unidos. La atracción hacia formas estéticas, visuales y materiales relacionadas con la imagen del capo, por ejemplo, es mucho más expandida ahora que en los años de auge del Cártel de Medellín, asegura Andrade.