El partido que jugó en mayo la selección alemana contra Kuwait no sólo sirvió como preparación para el mundial de Japón y Corea del Sur. Los beneficios recaudados gracias al encuentro, cercanos a los dos millones de euros, se destinarán íntegramente a las tareas de ayuda social de la Fundación Egidius Braun, de la Federación Alemana de Fútbol.

Desde 1996 se realizan partidos a beneficio cada dos años, en las semanas previas a un gran evento futbolístico. Su lema: "el fútbol es más que un 1:0".

Ayuda a México

El dinero así recaudado se destina a diversos programas alemanes de ayuda y, sobre todo, a la iniciativa de ayuda a México creada por Braun en 1986. La idea surgió durante el mundial de fúbol celebrado en ese país latinoamericano, con el fin de respaldar a niños vagabundos o huérfanos. Tras haber visitado un orfelinato, el entonces delantero de la selección alemana Rudi Völler, donó espontáneamente los primeros 5 mil marcos.

Entretanto se han invertido allí más de un millón de euros. El dinero proviene de donaciones y partidos especiales, como los que se jugaron en la despedida del propio Völler o de Guido Buchenwald. Pero la fuente principal de recursos son los ya mencionados partidos amistosos de la selección alemana.

Querétaro y Guadalajara

En Querétaro, donde le correspondió jugar al equipo alemán en 1986, se presta asistencia a un hogar de niños. Y en Guadalajara se desarrolla un nuevo proyecto, que consiste en construir una escuela en un barrio pobre y apartado, que no cuenta con agua ni energía eléctrica.

Otra de las organizaciones de carácter social del fútbol alemán es la Fundación Sepp Herberger, creada en 1976 con motivo del octogésimo cumpleaños del antiguo entrenador de la selección germana.

Desde 1976, la Federación Alemana de Fúbol ha destinado aproximadamente 15 millones de euros a las tareas de asistencia social.