"Debemos hacer lo máximo (para liberar a los rehenes), pero nada sería peor que ceder", sostuvo Fabius, refiriéndose al secuestro de la familia francesa de siete miembros a los que ahora buscan las fuerzas especiales francesas.

 Los tres adultos y cuatro niños fueron secuestrados el martes por hombres en motocicletas cuando viajaban por el Parque Nacional Waza, en el extremo norte de Camerún. Luego fueron llevados a la frontera con Nigeria, de acuerdo con un ministro camerunés.

La amenaza de Boko Haram

El ministro de Defensa Francés, Jean Yves Le Drian, estimó que detrás de esta acción figura la secta radical islámica Boko Haram. "Ese grupo amenaza nuestra seguridad", dijo en declaraciones al canal France 2. "Quieren crear un espacio sin ley entre el golfo de Guinea y Sudán", señaló. Su objetivo es utilizar el Sahel de plataforma para actuar en Europa.

La compañía gasística francesa GDF Suez confirmó que el padre de familia es un trabajador suyo en Yaundé, la capital de Camerún. Medios franceses indicaron que los menores tienen entre cinco y 12 años.

Llamado a evitar la región

Aún no se sabe si el secuestro de la familia Moulin-Fournier está vinculado con la sexta semana de campaña militar francesa contra los rebeldes islamistas en el norte de Mali.  Los grupos rebeldes ya habían amenazado con tomar represalias, por lo que los ciudadanos franceses son considerados especialmente vulnerables en la zona.

Esto llevó a que el Ministerio de Asuntos Exteriores francés urgiese hoy a sus ciudadanos residentes en el extremo norte de Camerún a dejar el área "lo más rápido posible". Desaconsejó también viajar a la región, incluyendo la frontera de Camerún con Nigeria y Chad.

La secta de Boko Haram quiere instalar un Estado islámico en el norte de Nigeria e introducir la Sharia (ley islámica). Sus seguidores veneran a la red terrorista Al Qaeda.

er (dpa, afp)