Fallas de ingeniería causaron implosión del submarino Titán
16 de octubre de 2025
Fallas de ingeniería provocaron la implosión de un sumergible privado durante una expedición en 2023 a los restos del Titanic, según declaró el miércoles la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) de EE. UU.
El informe final de la NTSB se publica después de que una investigación de la Guardia Costera estadounidense en agosto revelara una serie de problemas con los procedimientos del operador OceanGate, así como fallas de diseño en su sumergible Titán. Las fallas provocaron una "tragedia evitable" en la que fallecieron los cinco pasajeros.
¿Qué dice el informe sobre el Titán?
El informe concluyó que las fallas de ingeniería del sumergible Titán "resultaron en la construcción de una cápsula a presión de compuesto de fibra de carbono que presentaba múltiples anomalías y no cumplía con los requisitos necesarios de resistencia y durabilidad".
Añadió que, debido a que OceanGate no realizó pruebas adecuadas al Titán, "la empresa desconocía la resistencia y durabilidad frente a condiciones de gran presión".
Además, el análisis de OceanGate de los datos de monitoreo en tiempo real de la cápsula a presión del Titán presentaba fallas, por lo que la compañía desconocía que el submarino estaba dañado y debía ser retirado inmediatamente del servicio tras una inmersión previa, añadió.
El informe también indica que los restos del Titán probablemente se habrían encontrado antes si OceanGate hubiera seguido los estándares de respuesta a emergencias, lo que habría ahorrado tiempo y recursos.
¿Qué pasó con el sumergible Titán?
En 2023, el sumergible Titán, operado por OceanGate, emprendió una expedición con los restos del Titanic como destino. Los asientos en el sumergible tenían un precio de 250.000 dólares (215.000 euros) por persona.
Aproximadamente una hora y 45 minutos después de la partida del sumergible, se perdió la comunicación con el vehículo.
Según se supo después, el submarino implosionó, causando la muerte de las cinco personas a bordo, incluido el director ejecutivo de OceanGate, Stockton Rush.
Los restos del Titán se encontraron unos días después y los cadáveres de las personas a bordo se recuperaron cuando el submarino fue sacado a la superficie.
OceanGate detuvo todas sus operaciones tras el incidente y el año pasado fue demandada por la familia de uno de los pasajeros que falleció en la implosión.
(ap, afp/el)