FARC tienen “oportunidad histórica” de alcanzar la paz
20 de octubre de 2013 Eduardo Montealegre aseguró que se han logrado avances nunca antes imaginados en las negociaciones de paz que llevan adelante las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el Gobierno de Colombia en La Habana, Cuba. Por lo mismo, sostuvo que la guerrilla tiene una “oportunidad histórica” de firmar la paz y, si no lo hace, “se cerrará para siempre la puerta de una salida negociada” al conflicto de más de medio siglo de duración.
Las declaraciones del fiscal general fueron publicadas este domingo (20.10.2013) en el diario El Tiempo de Bogotá, y muestran que el ánimo para acabar de una vez con los enfrentamientos que han desangrado al país sudamericano existe en todos los frentes. Montealegre, empero, llamó la atención sobre las condiciones para firmar la paz, las que a su juicio “no serán repetibles”. Por lo mismo, exigió aprovechar este momento.
“Esta oportunidad histórica difícilmente se va a repetir. Si las FARC no aprovechan este momento en que tenemos tesis muy razonables para defender como colombianos nuestro marco de justicia transnacional ante la Corte Penal Internacional (CPI) y ante el Sistema Interamericano, se les cerrará para siempre la puerta a una paz negociada”, dijo el fiscal, quien valoró la “voluntad sincera de las FARC de llegar a un acuerdo”.
Pero los enfrentamientos siguen
El fiscal también dijo que la guerrilla “debe tener la oportunidad de conseguir por la vía democrática la transformación radical de la sociedad a través de sus ideales. Creo impensable que las FARC no intenten hacer una transformación del Estado a través de los mecanismos que ofrece la democracia, especialmente cuando lo han intentado hacer sin éxito a través de la violencia”.
Esa violencia que, por desgracia, no cede en Colombia. Este mismo domingo, un combate entre presuntos miembros de las FARC y tropas del Ejército dejaron un militar muerto y seis heridos. El enfrentamiento se registró en Putumayo (sur de Colombia), cerca de la frontera con Ecuador, donde los guerrilleros pretendían atentar contra un oleoducto.
Por otro lado, las mismas FARC entregaron a un policía que estaba secuestrado desde el pasado 10 de octubre, cuando cayó en manos de los rebeldes en una zona rural del departamento de Nariño, en el suroeste del país. El funcionario fue entregado al Comité Internacional de la Cruz Roja y “está en buenas condiciones de salud”, según un comunicado de Cruz Roja.
DZC (dpa, El Tiempo)