“Ordenamos a todas nuestras unidades cesar cualquier acción militar ofensiva contra las Fuerzas Armadas del Estado o la infraestructura económica, a partir de las 00.00 horas del martes 20 de mayo, hasta las 24.00 horas del miércoles 28 de mayo”, dice el comunicado dado a conocer este viernes (16.05.2014) en La Habana, donde la delegación de paz de las FARC divulgó la decisión tomada por los altos mandos de las mayores guerrillas colombianas.

La orden, acordada en las montañas de Colombia y firmada por Timochenko, como máximo líder de las FARC, y Nicolás Rodríguez, jefe supremo del Ejército de Liberación Nacional (ELN), marca el tercer alto al fuego unilateral declarado por las FARC desde que comenzaron los diálogos con el Gobierno, en noviembre de 2012, y el primero que realizan de forma conjunta con el ELN durante el proceso.

La medida permitirá que las elecciones, donde corren con ventaja el actual mandatario Juan Manuel Santos y el derechista Óscar Iván Zuluaga, se realicen en un clima de paz y sin peligro de atentados. Santos impulsa los diálogos de paz, mientras que Zuluaga, exministro de Hacienda del expresidente Álvaro Uribe, no apoya las conversaciones en las actuales condiciones.

¿Cese al fuego extendido?

El texto fue leído en la capital de Cuba por el negociador de las FARC, “Pablo Catatumbo”, quien aseguró que la decisión adoptada por las guerrillas, fuertemente debilitadas por sucesivos éxitos de las Fuerzas Armadas de Colombia, responde a un “clamor nacional” de parte de la ciudadanía, que desea que el clima político electoral “se caracterice por la mayor ausencia de perturbación”.

“Ya veremos si se modificarán el lenguaje, las órdenes de los altos funcionarios y miembros de la cúpula militar o policial, con relación a nuestro gesto, además lo hacemos como luz de esperanza para un cese al fuego bilateral”, señalan las guerrillas, que en reiteradas ocasiones han pedido que la paz se extienda durante las negociaciones de paz, algo que el gobierno no ha aceptado.

Las guerrillas dicen en su comunicado que aspiran a una “efectiva y pronta reconciliación entre los colombianos”. Mientras el gobierno negocia con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en La Habana, mantiene contactos menos formales con el ELN para sentar las bases que permitan iniciar una negociación separada a la que se realiza con las FARC.

DZC (Reuters, EFE)