Felicitación a Fidel sigue causando revuelo
22 de agosto de 2011
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Gesine Lötzsch, uno de los dos presidentes de La Izquierda (Die Linke), defendió nuevamente la controvertida felicitación a Fidel Castro. El fin de semana se supo que los presidentes de La Izquierda, Gesine Lötzsch y Klaus Ernst, habían felicitado a Castro en su 85 cumpleaños por “una vida plena de lucha y exitosa actuación al mando de la revolución cubana”. Asimismo elogiaban también “las conquistas sociales sin parangón”, alcanzadas por el país socialista y le aseguraban al pueblo cubano su “amistad inquebrantable y solidaridad”.
Este lunes (22.08.2011) Lötzsch explicó que no había mencionado la situación de los derechos humanos, ni la falta de democracia en Cuba, porque no se acostumbra algo así en una carta de congratulación. Sin embargo, reconoció que “siempre se puede encontrar una formulación mejor y más linda”. La política izquierdista también dijo que en sus visitas a Cuba representantes de Die Linke una y otra vez tematizaron la situación de los derechos humanos. Lötzsch destacó que la libertad de prensa, de reunión y de opinión son importantes y añadió que los cubanos deben “encontrar un camino pacífico hacia las reformas”.
Críticas dentro y fuera del partido
Como era de esperarse, también la Unión Demócrata Cristiana (CDU) criticó la carta de felicitación a Fidel Castro. El secretario general de la CDU, Hermann Gröhe, habló de “manifestaciones escandalosas”. Gröhe exigió que el partido socialdemócrata alemán (SPD) en las próximas elecciones regionales en Mecklemburgo-Pomerania Occidental y en Berlín deje en claro que no es posible colaborar en un gobierno con un “partido político más que dudoso”.
Izquierda dividida
Pero más allá de todas las críticas concretas, crece el descontento dentro de La Izquierda misma. “Nos detenemos en temas periféricos, para destrozarnos y pelearnos”, dijo la secretaria de su grupo parlamentario en el Bundestag, Dagmar Enkelmann.
“Los temas realmente importantes quedan completamente omitidos”, agregó Enkelmann y exigió que su partido se volviera a concentrar en contenidos, como ser las consecuencias de la crisis económica. También el presidente de La Izquierda en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Steffen Bockhahn, dijo que se “alegraría que el partido federal lograra hablar de temas esenciales como el salario mínimo, Afganistán y una mejor educación”. Gesine Lötzsch, por su parte, dijo que los debates internos deben ser postergados hasta después de las elecciones en Mecklemburgo-Pomerania Occidental y en Berlín.
Autora: Valeria Risi
Editor: Pablo Kummetz
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