La Niña podría reaparecer antes de finales de 2021, solo cinco meses después de que la Organización Meteorológica Mundial (OMM) declaró terminado el fenómeno.
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La OMM estima que hay un 40% de posibilidades de que la Niña -que corresponde al enfriamiento a gran escala de las aguas de la superficie en el centro y este del Pacífico ecuatorial- reaparezca tras su presencia desde agosto de 2020 hasta mayo de este año.
"Pero a pesar del fenómeno La Niña, que habitualmente tiene como efecto enfriar el clima, las temperaturas medidas en tierra deberían ser superiores a la media entre septiembre y noviembre, especialmente en el hemisferio norte", subraya la organización.
La Niña, cada vez más frecuente, más fría y lluviosa
El impacto de La Niña, que se produce entre cada dos a siete años, se siente en gran parte del planeta bajo la forma de variaciones en la presión atmosférica, los vientos y las precipitaciones, con efectos en general inversos al de otro fenómeno, El Niño. Pero el cambio climático provocado por las actividades humanas influye sobre estos fenómenos.
"El cambio climático de origen antrópico amplifica los efectos de los fenómenos naturales como La Niña e influye cada vez más en nuestras condiciones meteorológicas, lo que se traduce especialmente en un calor y una sequía más intensos (y el riesgo asociado de incendios forestales), así como precipitaciones e inundaciones récord", declaró el secretario general de la OMM, Petteri Taalas.
"Hemos sido trágicamente testigos durante los últimos meses en casi todas las regiones del mundo. El cambio climático aumenta la gravedad y la frecuencia de las catástrofes", subrayó, en alusión tanto a los gigantescos incendios que afectaron el oeste de Estados Unidos y Siberia como al huracán Ida que arrasó el sur de Estados Unidos antes de dejar bajo el agua a Nueva York y sus estados vecinos a raíz de muy fuerte precipitaciones.
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Temperaturas superiores a la media
La OMM dijo que si la Niña reaparece se espera que sea de manera débil, y las temperaturas de la superficie del mar superiores a la media debería influir en las temperaturas del aire para el periodo comprendido entre septiembre y noviembre de 2021. De acuerdo con la organización, las temperaturas serían superiores a la media en el centro-este de América del Norte, el extremo norte de Asia y el Ártico, al igual que en el centro y este de África y el sur de América del Sur.
Hay una mayor probabilidad de precipitaciones inferiores a lo normal en muchas zonas del sur de América del Sur. Una gran parte del Mediterráneo hasta la península arábiga y Asia Central, y el sur de África central y oriental también registrarían precipitaciones inferiores a lo normal.
jov (afp, omm)
Fenómenos meteorológicos extremos conmocionan al mundo
Desde Alemania a Canadá y China, las dramáticas escenas de los daños generados por un clima enloquecido han sido recurrentes en las noticias. ¿Podemos culpar al cambio climático?
Imagen: Noah Berger/AP Photo/picture alliance
Terribles inundaciones en Europa
Inundaciones sin precedentes causadas por la caída en dos días de lluvias que debían precipitar en dos meses generaron enormes daños en Europa, dejando al menos 209 personas muertas en Alemania y Bélgica. En horas, pequeños arroyos se convirtieron en furiosos torrentes que arrasaron con comunidades centenarias. Reconstruir las casas, negocios e infraestructura costará miles de millones de euros.
Imagen: Thomas Lohnes/Getty Images
Temporada de lluvias extremas
Las inundaciones también se hicieron presentes en India y China, colapsando represas y desagües e inundando el metro de la ciudad china de Zhengzhou. Docenas de personas han perdido la vida. Los aguaceros han sido intensos incluso para la temporada de lluvias. Los científicos habían predicho que el cambio climático provocará lluvias más frecuentes y fuertes en la región.
Imagen: AFP/Getty Images
Olas de calor récord en Estados Unidos y Canadá
También las olas de calor intenso se están volviendo más comunes, como se vio a fines de junio en los estados de Washington y Oregon (EE.UU.), y en la Columbia Británica (Canadá). Temperaturas abrasadoras surgidas bajo una "cúpula cálida", aire caliente atrapado entre frentes de altas presiones, causaron cientos de decesos. La localidad de Lytton registró una temperatura de 49,6 grados Celsius.
Imagen: Ted S. Warren/AP/picture alliance
Incendios forestales colosales
La ola de calor pudo haberse terminado, pero las condiciones de sequedad están alimentando una de las temporadas de incendios forestales más intensas que haya vivido la región. El llamado "Bootleg Fire" de Oregon, que ha quemado una superficie del tamaño de Los Ángeles en solo dos semanas, es tan enorme que ha creado su propio microclima y ha enviado humo incluso hasta Nueva York.
Imagen: National Wildfire Coordinating Group/Inciweb/ZUMA Wire/picture alliance
¿Se acerca la Amazonía a un "punto de no retorno"?
Más hacia el sur, el centro de Brasil está sufriendo la peor sequía de la que se tenga registro en 100 años, lo que aumenta el riesgo de incendios y, con ello, de una mayor deforestación de la Amazonía. Investigadores han reportado que una gran franja del sureste de dicho pulmón verde ha pasado de absorber CO2 a emitirlo, lo que deja a la selva más cerca de un punto de no retorno.
Imagen: Andre Penner/AP Photo/picture alliance
"Al borde de la inanición"
Después de años de una sequía implacable, más de un millón de personas de Madagascar padecen de inseguridad alimentaria, y muchas -en condición de hambruna- se ven forzadas a comer cactus, hojas y langostas. Ante la ausencia de desastres naturales, malas cosechas o conflictos, se dice que la terrible situación de este país es la primera hambruna causada únicamente por el cambio climático.
Imagen: Laetitia Bezain/AP photo/picture alliance
Más personas huyen debido a los desastres naturales
El número de personas que huyen de conflictos y desastres naturales alcanzó un récord en 2020, con 55 millones de seres humanos reubicándose dentro de las fronteras de sus propios países. A eso se suman unas 26 millones de personas que escaparon de sus patrias. Tres cuartas partes de los desplazados internos fueron víctimas de condiciones climáticas extremas, y ese número seguirá aumentando. (dz)