El presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino, rechazó las acusaciones que viene recibiendo y consideró que sus críticos se sienten amenazados por las reformas que está impulsando en el ente rector del fútbol mundial. "Ese cuadro lo quieren provocar personas que, con las reformas que vengo impulsando, se sienten en peligro. Y por eso me atacan", indicó Infantino en una entrevista que publicó hoy el periódico suizo "SonntagsBlick". Infantino fue acusado por haber violado el código de ética de la FIFA, pero la Comisión de Ética lo absolvió de todos los cargos, de acuerdo con lo comunicado hace tres semanas por la entidad. Entre otras acusaciones, al dirigente se le cuestionaba el uso indebido de aviones privados para movilizarse, la contratación de personal para su oficina y la negativa del propio Infantino a firmar el contrato en el que se especificaba su cargo como presidente del organismo. "Tal vez haya personas que tienen miedo que las cosas que no se hicieron bien antes salgan a luz", insistió Infantino. El jefe del fútbol mundial, en tanto, insistió en la idea de aumentar de 32 a 40 equipos los participantes en la Copa del Mundo y colocó el éxito de la reciente Eurocopa como ejemplo. "Hay que mirar el estado de ánimo de los islandeses, los galeses, los albaneses o los húngaros. Esa euforia es fantástica", remarcó Infantino. (dpa)