El exjefe de la Federación de Fútbol de Costa Rica (FEDEFUTBOL) Eduardo Li admitió ante la justicia de Estados Unidos haber recibido comisiones ilegales de hasta 668.000 dólares y haberse apropiado de fondos de la FIFA.
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Este viernes (7.10.2016), el exjefe de la Federación de Fútbol de Costa Rica (FEDEFUTBOL) Eduardo Li se declaró culpable de tres de los catorce cargos esgrimidos en su contra en el marco de la investigación del escándalo de corrupción conocido como "FIFAgate”. Li admitió ante la justicia de Estados Unidos haber recibido comisiones ilegales de hasta 668.000 dólares, haber negociado un soborno de 500.000 dólares –de los cuales 300.000 se quedaron en sus bolsillos–, haber recibido un soborno de 230.000 dólares y haberse apropiado de 90.000 dólares que la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) había destinado a la organización del mundial de fútbol femenino sub-17, disputado en Costa Rica en 2014.
Li es una de las 42 personas y entidades implicadas en el caso que sacude a la FIFA desde que se descubrió, hace un año y medio, una maraña de sobornos que salpicó a altos dirigentes del organismo. El escándalo se cobró la cabeza del suizo Joseph Blatter, presidente de la FIFA cuando los delitos tuvieron lugar. Li estuvo detenido varios meses en Suiza, luego de que se produjeran siete arrestos el 27 de mayo del 2015 durante un congreso de la FIFA en Zúrich. Más tarde, el costarricense de 57 años decidió someterse a la jurisdicción de la justicia de Estados Unidos, donde se destapó el caso. Li se encuentra en libertad bajo fianza en Estados Unidos, mientras el proceso judicial sigue su curso.
El exdirector de FEDEFUTBOL asumió su responsabilidad ante la jueza Pamela Chen por conspiración para cometer crimen organizado, participación en un esquema de fraude electrónico y conspiración para cometer fraude electrónico. "Estos tres cargos imputan a don Eduardo en un esquema de actividades consideradas delictivas y de usar como medio de pago transferencias electrónicas derivadas o dirigidas a los bancos de Estados Unidos”, explicó la defensa de Li, acotando que Li se mostró "arrepentido” y "pidió perdón a Costa Rica” por sus actuaciones cuando era el máximo jerarca del fútbol en ese país centroamericano. Hasta ahora, diecisiete personas y dos entidades se han declarado culpables en este caso.
ERC ( dpa / Reuters )
Blatter, el fin de una carrera (jun. 2015)
La Comisión de Ética de la FIFA puso fin adelantado a la era de Joseph Blatter al frente del fútbol mundial. Su trayectoria atravesó durante cuatro décadas a la institución, en las que venció casi todas las crisis. Casi.
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Blatter: el rey da la pelea
Joseph Blatter no quiere dejar su puesto así como así y este viernes presentó un recurso en contra de la sanción que le impuso el Comité de Ética de la FIFA, sanción que lo inhabilitó por 90 días de su cargo como presidente. Blatter asegura haber recibido un trato injusto y, por medio de sus abogados, dijo sentir "decepción y disconfiormidad" por la suspensión.
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Ambiciones en jaque
Pero la Comisión de Ética no solo suspendió al presidente de la instittución, sino que también apuntó sus dardos contra el jefe de la UEFA, Michel Platini. Esto pone en dificultades al francés, que ambicionaba convertirse en el sucesor del suizo al mando de la institución deportiva. Ahora lo tiene mucho más difícil.
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Carrera veloz
Cuando Blatter llegó a la FIFA en 1975, ya contaba con un currículo interesante. Había sido secretario de la Federación Suiza de Hockey, jefe de prensa de la Asociación Deportiva Suiza y director de relaciones públicas en una empresa fabricante de relojes. A instancias del jefe de Adidas, Adolf Dassler, llegó al ente del balompié y se convirtió en secretario general en 1981.
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En la cima
Luego de ser secretario general bajo la presidencia del brasileño Joao Havelange durante 17 años, el ambicioso Blatter tuvo su oportunidad de alcanzar el poder. En 1998 ganó las elecciones contra el expresidente de la UEFA, Lennart Johansson (izq.), y se convirtió en el sucesor de Havelange. De inmediato comenzaron los rumores de que había comprado votos.
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Enormes pérdidas
Blatter fue acusado continuamente de mala gestión financiera. Apenas un año después de su elección, su propio secretario general, Michel Zen-Duffinen (derecha), se lanzó a la ofensiva y acusó al suizo de haber generado pérdidas en comercialización por más de 100 millones de dólares. Blatter evitó una investigación interna, superó una demanda en los tribunales y sacó del camino a Zen-Ruffinen.
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Y el ganador es... ¡Alemania!
En el verano de 2000, el suizo se convirtió en un hombre determinante para el fútbol alemán. Todos estaban atentos a sus labios cuando avisó que el Mundial de 2006 se realizaría en Alemania. Los fanáticos se alegraron con este cuento de hadas y Blatter, mientras, seguía cimentando su poder dentro de la institución. En 2002 volvió a ganar, otra vez en medio de rumores de compra de votos.
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El enemigo interno
En estos años, un estrecho colaborador de Blatter fue Mohammed bin-Hammam, miembro ejecutivo de Qatar en la FIFA. Apenas Blatter vio en su aliado a un competidor, su relación se rompió. En 2011, Bin Hammam se presentó como rival del suizo en las elecciones de la FIFA, pero surgieron acusaciones en su contra por sobornos. Renunció a la candidatura y después fue suspendido de por vida por la FIFA.
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En los círculos de poder
A Blatter le gustaba codearse con los cícrulos de poder. Secretarios generales de la ONU, presidentes, el Papa... tarde o temprano, el hombre más poderoso del mundo se reunía con todos. En 2004 se encontró con el héroe sudafricano Nelson Mandela, a quien finalmente le prometió que el próximo mundial de fútbol se realizaría en África. De hecho, Sudáfrica tuvo el honor en 2010.
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Contra todos
En las elecciones de 2015, el escenario no parecía tan halagüeño. El surgimiento de varias candidaturas hizo suponer que el camino sería más pedregoso. Pero poco a poco comenzaron a bajarse todos y solo quedó el príncipe jordano Ali bin al Hussein. Ni siquiera la detención de altos funcionarios de la FIFA en Zúrich evitó las elecciones. Blatter volvió a ganar y se lanzó contra sus críticos.
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Sí, renuncia, pero no todavía
Cuatro días después de su polémica reelección como presidente de la FIFA, Joseph Blatter dio un paso al costado. Anunció que dejaría el cargo, pero a comienzos de 2016. Durante 17 años fue el principal hombre de la institución del balompié. Y aunque muchos pidieron que se fuera de inmediato, Blatter se negó. Quería quedarse hasta que su sucesor fuera elegido.
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Y al final...
Así quedaba esta historia. Pero ahora la justicia suiza se lanzó directamente contra Blatter. La acusación: venta de derechos de transmisión televisiva del Mundial a precio de oferta a su exvicepresidente, Jack Warner, además de un dudoso pago millonario a Michel Platini. La Comisión de Ética de la FIFA hizo lo propio, sacando tanto a Blatter como a Platini de circulación.
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La FIFA planea reunión de emergencia
Ahora el comité ejecutivo de la FIFA debe decidir si celebra una reunión de emergencia tras la suspensión de Blatter. La semana entrante la entidad tomará una resolución al respecto, dijo este viernes 9 de octubre un portavoz, quien sostuvo que los miembros del comité consultarán con el presidente en funciones de la FIFA, el camerunés Issa Hayatou (en la foto), el procedimiento estándar a seguir.