Filipinas aguarda llegada de ayuda tras el tifón
11 de noviembre de 2013 Más rescatistas y provisiones han sido derivados a las provincias del este del país azotadas por el tifón, que las agencias de ayuda y los funcionarios estiman dejó más de 10.000 muertos y cerca de 2.000 desaparecidos. El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, dijo a los supervivientes que el Gobierno estaba aumentando los esfuerzos y llamó a cooperar en medio de informes de saqueos en la ciudad de Tacloban, la capital de la provincia de Leyte, una de las zonas más afectadas. Tres días después del paso
del tifón, que asoló el centro y este del país, el país se enfrenta a la escasez de alimentos y agua potable, y el Gobierno declaró el estado de emergencia.
"El gobierno nacional asumirá temporalmente el mando de los gobiernos locales y estaremos desplazando más gente para completar las posiciones que quedaron vacantes repentinamente", dijo el mandatario tras visitar Tacloban. Se teme que miles de personas hayan muerto en Leyte y en la vecina provincia de Samar. La policía y los rescatistas confirmaron que la mayoría de las víctimas murieron ahogadas por olas parecidas a las de un tsunami.
China: al menos tres muertos
Al menos tres personas murieron y 39.000 fueron evacuadas por la llegada a la provincia de Hainan, en el sur de China, de "Haiyan", que pese a que se debilitó a tormenta tropical sigue causando lluvias torrenciales, informaron las autoridades. El tifón afectó a unas 480.000 personas en la isla de Hainan, ubicada al este de Vietnam. Las lluvias y vientos destruyeron decenas de viviendas y dañaron varios cientos en la zona, informó la oficina local de Defensa Civil.
Además hay siete desaparecidos, miembros de la tripulación de un barco que circulaba frente a las costas de Hainan, informó la agencia oficial Xinhua. La tormenta también afectó a las provincias vecinas de Guangxi y Guangdong, en el sur de China. Por la mañana azotó el distrito de Ningming en Guangxi con vientos de unos 120 kilómetros por hora, y dejó precipitaciones de hasta 291 milímetros en 24 horas en las áreas de Beihai, Fangcheng y Shangsi.
"Haiyan" pasó por Filipinas el viernes, donde dejó ciudades reducidas a escombros con sus vientos de hasta 300 kilómetros por hora. En su camino hacia Vietnam se debilitó, pese a lo cual sigue causando daños.
CP (dpa, rtr)