El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer, goza de la confianza del 68 por ciento de los alemanes a pesar del escándalo de los visados, mientras que su partido, Los Verdes, ha descendido en las encuestas por debajo del diez por ciento, su peor valor desde hace más de un año. Así se desprende de la última encuesta del instituto demoscópico Forsa, encargada por el semanario 'Stern' y la cadena privada de televisión 'RTL' . El escándalo de los visados se refiere a la flexibilización de la política de concesión de los mismos en consulados alemanes de países del este de Europa a partir de 2000, especialmente en Ucrania, algo que pudo haber fomentado la entrada al espacio Schengen de redes de prostitución ilegal y otros criminales. En la encuesta de Forsa, el 68 por ciento de los ciudadanos cree que Fischer debe permanecer en su puesto, mientras que el 23 por ciento quiere que dimita y un 9 por ciento está indeciso.