El museo de Frida Kahlo en Alemania no solo reúne la mayor colección de obras de la artista mexicana, sino que las muestra en el contexto de su singular vida. A 60 años de su muerte, sigue fascinando al público.
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Este domingo (13.07.2014) se cumplen 60 años de la muerte de la pintora mexicana Frida Kahlo. Mariella Remund, curadora del único museo en Alemania dedicado a la vida y obra de la artista, asegura que hasta la fecha Frida no ha perdido nada de su actualidad y fascinación: “Aún hoy día, seguimos descubriendo nuevos aspectos de ella. Es tan polifacética como un prisma. No solo fue artista, mujer, esposa de Diego Rivera y amante de varios hombres y mujeres”.
Remund también destaca otros aspectos de su personalidad como su lucha política, su interés por la revolución mexicana y las culturas indígenas, así como su sentido de la moda.
“Tiene tantas facetas que cada visitante descubre a su propia Frida. Tenemos la teoría de que sus cuadros son como un espejo. Los visitantes proyectan sus emociones en los cuadros y estos las reflejan. Algunos visitantes nos dicen que la exposición es triste y deprimente, a otros les parece alegre, fuerte y colorida. Frida, por su parte, fue ambas cosas”, señala Remund, en entrevista con DW.
Un museo único a nivel mundial
En el año 2009, los coleccionistas de arte Hans-Jürgen Gehrke y Mariella Remund abrieron las puertas del Museo de Arte Gehrke-Remund en la ciudad de Baden-Baden, cerca de la tierra natal del padre de Frida, el alemán Wilhelm Kahlo. Este recinto ofrece al público una experiencia exclusiva.
El Museo de Arte Gehrke-Remund es el único en el mundo que tiene el permiso oficial para hacer réplicas de todas las obras de la artista mexicana. La curadora cuenta que la mayoría de las 127 obras originales de Frida están en manos de coleccionistas privados. Solo 43 cuadros se exhiben al público, sobre todo en México.
El museo en Baden-Baden posee 123 réplicas de las obras de Frida Kahlo, incluso de aquellas que pertenecen a coleccionistas privados. Ninguna otra exposición reúne tantas obras de la pintora, por ejemplo, todos sus autorretratos. Remund explica que las réplicas corresponden al cien por ciento al original, tanto en tamaño, como en material, color y estilo. Todas están hechas a mano por artistas y no por copistas, añade.
Un legado universal
Un concepto innovador del museo es que no se limita a exhibir los cuadros de la pintora mexicana, sino que los muestra dentro del contexto de su vida. A lo largo de los últimos cinco años, Gehrke y Remund han reunido más de 1.000 objetos para su exposición, como fotos, vestidos, rebozos, joyas y figuras aztecas. El museo hasta cuenta con una réplica detallada del patio de la casa de Frida en Coyoacán, la llamada Casa Azul, así como de su famosa cama con dosel.
En 2013, el Museo de Arte Gehrke-Remund prestó su exposición a la ciudad estadounidense de San Diego, donde vive una gran comunidad mexicana. Según Remund, las reacciones y emociones del público en EE. UU. y Alemania fueron las mismas, subrayando la universalidad y actualidad de Frida Kahlo.
A 60 años de la muerte de la artista, ¿cuál es su legado más importante? “Su fuerza interior. A los seis años, Frida se enfermó de poliomelitis, quedando su pierna derecha más delgada y corta. Después tuvo ese horrible accidente de autobús que por poco la deja para siempre en silla de ruedas. Frida dijo que su esposo Diego Rivera fue su segundo gran accidente, con todo el dolor emocional que sufrió. Y a pesar de todo, siempre decía que iba a sobrevivir, que lo iba a lograr. Esa fuerza se refleja en los colores, las flores y las miradas en sus cuadros. Muchos visitantes la sienten, les da fuerza y esperanza”, opina Remund.
A finales de 2014, el Museo de Arte Gehrke-Remund volverá a abrir sus puertas al público en la ciudad alemana de Baden-Baden. A continuación, lo invitamos a recorrer la exposición sobre la vida y obra de Frida Kahlo en esta galería de imágenes.
El museo de Frida Kahlo en Alemania
El museo de Frida Kahlo en Alemania no solo reúne la mayor colección de obras de la artista mexicana, sino que las muestra en el contexto de su singular vida, que, a 60 años de su muerte, sigue fascinando al público.
Imagen: Kunstmuseum Gehrke-Remund
El primero de muchos autorretratos
La mayoría de las pinturas de Frida Kahlo están en manos de coleccionistas privados. El Museo de Arte Gehrke-Remund, en Alemania, posee 123 réplicas licenciadas de las obras de la artista mexicana. En este recinto, los visitantes tienen la oportunidad única de ver todos sus autorretratos juntos, como este, de 1926: “Autorretrato con un vestido de terciopelo”.
Hans-Jürgen Gehrke y Mariella Remund, los fundadores del museo, han viajado reiteradas veces a México para estudiar y documentar la obra de Frida. Las réplicas que exhiben en Baden-Baden son idénticas al original. Únicamente de cuatro cuadros no han podido hacer una réplica, puesto que de estos solo se conservan fotos en blanco y negro.
Con la ayuda de antiguas fotos de la casa de nacimiento de Frida Kahlo en Coyoacán, México, el Museo de Arte Gehrke-Remund reconstruyó en detalle su patio, que destaca por el intenso color azul añil de su fachada. Entre los cactus y las figuras aztecas y mayas, los visitantes encontrarán un pedazo de México en Alemania.
El Museo de Arte Gehrke-Remund no es un museo cualquiera. Inspirado en la “Casa Azul”, el espacio no solo exhibe las obras de Frida Kahlo, sino también cientos de objetos, como joyas, vestidos, rebozos, muebles, trastes y fotografías. Estos nos hablan de la vida de la artista y muestran el contexto de creación de sus pinturas.
Frida también impresionó a sus contemporáneos con su singular sentido de la moda, luciendo hermosos trajes coloridos, típicos del Estado de Oaxaca, tierra natal de su madre. En el Museo de Arte Gehrke-Remund se pueden apreciar vestidos, rebozos y joyas como las que usaba la artista.
En la “Casa Azul”, en Coyoacán, Frida recibió a artistas e intelectuales mexicanos e internacionales. Uno de sus huéspedes más famosos fue, sin duda, el político revolucionario León Trotski. En su cocina, la anfitriona preparó deliciosos platos mexicanos para agasajar a sus huéspedes. En la imagen se puede ver una réplica de la mesa de cocina.
Imagen: Kunstmuseum Gehrke-Remund
El lado alemán de Frida
Wilhelm Kahlo, el padre de Frida, es originario de la ciudad alemana de Pforzheim, en el sudoeste del país. El apasionado fotógrafo heredó su vena artística a la pintora e influyó mucho en su trabajo. En la imagen se puede apreciar el estudio de Wilhelm Kahlo.
“Diego en mi mente”, se llama este cuadro. Frida Kahlo y el pintor mexicano Diego Rivera estuvieron casados dos veces, de 1929 a 1939 y de 1940 hasta la muerte de Frida, en 1954. Sus matrimonios estuvieron marcados por el amor y el dolor. En su diario, Frida escribió: “Diego es el nombre del amor”.
Frida pasó mucho tiempo acostada en su cama con dosel, recuperándose de aquel accidente de autobús que casi la dejó paralítica. En ella pintó su primer autorretrato. La famosa cama, en la que murió la pintora, también aparece en varios de sus cuadros. En la imagen se puede ver una réplica detallada del mueble.
Rojo, azul, verde, amarrillo: la pintora creó su propio mundo lleno de colores fuertes, brillantes y alegres. Pese a los serios reveses que sufrió, tanto los colores de sus cuadros como de su moda y su casa siempre reflejaron vida y esperanza.
En esta fotografía, que se exhibe en el museo, se puede ver a Diego Rivera cargando el féretro de Frida Kahlo. Después de su muerte, Rivera escribió: “... desmasiado tarde me di cuenta que mi amor por ella fue la parte más hermosa de mi vida”.