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Frida Kahlo por lo alto

29 de abril de 2010

Este 30 de abril se abre al público, en Berlín, la más grande y ambiciosa exposición retrospectiva de la artista mexicana que haya visto el mundo. DW-WORLD conversó con Helga Prignitz-Poda, curadora del proyecto.

Autoretrato de Frida Kahlo.

En la retrospectiva del Martin-Gropius-Bau de Berlín se podrán apreciar, gracias a la cooperación con coleccionistas públicos y privados de diferentes países, 150 obras de Frida Kahlo: 90 dibujos –muchos de ellos nunca antes expuestos públicamente- y 60 pinturas –entre ellas la última que realizó la artista- que constituyen poco más o menos el 50 por ciento de la producción total de la mexicana.

DW-WORLD: ¿Cómo describiría usted la relación del público alemán con la obra de Frida Kahlo?

Helga Prignitz-Poda: “Kahlo es recibida aquí con mucho entusiasmo desde hace más de 25 años, ciertamente también por su dramática biografía, que en la retrospectiva tendrá un papel secundario ya que el objetivo es resaltar su trabajo artístico y destacar su obra”.

Pero esa dramática biografía es uno de los factores importantes en la fama internacional de Frida Kahlo...

Es un poco lamentable que esa historia personal ocupe el primer plano y que el arte esté un poco al margen, pero para eso es esta exposición, por ello separamos la parte artística de la biográfica, que se podrá apreciar en una muestra fotográfica subordinada. Esperamos así lograr un cambio en la percepción de Frida Kahlo, lograr que su obra gane en reconocimiento.

¿Se entiende plenamente la obra de Kahlo?

Su trabajo está lleno de pequeñas claves de las que yo me he ocupado durante largos años y que en la exhibición se podrán descifrar ya que serán explicadas. No son complicadas, se trata de símbolos sencillos –como los que desarrollan los niños- llenos de significado sexual, de humor negro y de fantasía, que ella escondió en sus obras”.

La retrospectiva abarca casi la mitad de la obra total producida por la artista, un ambicioso proyecto…

La organización demandó tres años de trabajo intenso y sólo gracias a la cooperación de todos los involucrados culmina con éxito. Una exposición sobre Frida Kahlo de semejantes dimensiones seguramente no se podrá volver a ver en mucho, mucho tiempo.

60 pinturas, 90 dibujos, ¿fue difícil acceder a tantas obras de Frida Kahlo?

Yo estoy contenta de que tantas colecciones accedieran a prestarnos la obra, eso no es fácil. Además, muchas de ellas ya están cansadas de viajar, ya no están en condiciones de hacerlo, y otras han establecido una relación muy personal con sus propietarios, quienes no se separan de ellas a gusto.

¿Qué sorpresas le esperan al visitante de esta retrospectiva que se podrá ver hasta el próximo 9 de agosto en Berlín?

Hay muchas obras, en especial dibujos, que nunca antes han sido expuestos y que sólo se han visto en fotos y en catálogos. Esos dibujos son muy, muy íntimos, su carácter es muy personal y biográfico, por eso jamás fueron objeto de venta sino regalos de Frida Kahlo a sus seres queridos de los cuales hace décadas se tenía conocimiento pero no se habían mostrado al público.

¿Y cuál es la pieza estelar de la exhibición?

Se podría mencionar como tal, por ejemplo, la última obra que pintó Frida Kahlo antes de su muerte, su último autorretrato, que es muy bello, tierno y triste a la vez. Pero hay muchas otras sorpresas que vale la pena ver, porque nunca antes se han visto.

Autor: Daniel Martínez

Editora: Emilia Rojas

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