Las fuerzas iraquíes tomaron el control de Al Saqlauiya, al norte de la ciudad de Faluya, después de varios días de enfrentamientos con el grupo yihadista Estado Islámico (EI), informó a Efe una fuente de seguridad.
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La fuente de la provincia de Al Anbar, en la que se encuentra Faluya, detalló que las fuerzas iraquíes izaron la bandera nacional sobre la sede de la administración local de Al Saqlauiya.
La operación fue llevada a cabo por unidades del Ejército iraquí y de la milicia chií progubernamental Multitud Popular, que contaron en su avance con el apoyo de la aviación de la coalición internacional liderada por Estados Unidos.
En estos momentos prosiguen los violentos enfrentamientos entre las tropas iraquíes y los yihadistas en el núcleo de Al Saqlauiya, en el cual irrumpieron las fuerzas gubernamentales esta mañana. Según la fuente, decenas de yihadistas fueron abatidos o heridos en los combates.
Las fuerzas iraquíes buscan hacerse con el control total de Al Saqlauiya y aislarla, para que el EI no pueda recibir suministros en Faluya desde el flanco norte.
Con ayuda de la “coalición internacional”
La fuente añadió que la aviación de la coalición internacional bombardeó de forma "minuciosa" algunas agrupaciones de yihadistas en Al Saqlauiya y provocó la muerte de al menos 20 combatientes.
Las fuerzas iraquíes lanzaron una ofensiva sobre la ciudad de Faluya a principios de la semana y han realizado avances en los alrededores de la misma, pero estos son lentos debido a la resistencia del EI y a la presencia de decenas de miles de civiles en el interior de la urbe.
Desde el pasado día 23 de mayo, las tropas gubernamentales han expulsado a los yihadistas de áreas en torno a Faluya, situada 50 kilómetros al oeste de Bagdad y en manos del EI desde enero de 2014.
JOV (efe, n-tv)
Así se vive bajo el dominio del Estado Islámico
Raqqa y otras ciudades están bajo el control de la milicia islamista. Allí imponen su régimen de terror.
Imagen: picture-alliance/AP Photo
La bandera del terror
Allá, al fondo, se ve la bandera del terror. El Estado Islámico domina un tercio del territorio de Siria. En ese tercio, justo en el límite con Turquía, se encuentra Tel Abyad, que forma una sola ciudad junto a la localidad turca de Akcakale. Activistas aseguran que desde que el EI controla Tel Abyad, la frontera se encuentra cerrada.
Imagen: Reuters
Raqqa, la capital del EI
En Raqqa impera el negro: los edificios públicos tienen la bandera del EI, que es de ese color. Hasta los pasaportes emitidos por la guerrilla son oscuros. Las mujeres no pueden salir solas a la calle y siempre deben ir cubiertas por completo con vestimentas... negras. En los antiguos edificios públicos ahora operan los "ministerios" del EI.
Imagen: Reuters
Rezar o morir
Todos los días se hace un llamado a realizar plegarias. Entonces, los comerciantes deben cerrar sus tiendas y las personas deben salir de sus casas para ir a las mezquitas. De lo contrario, podrían ser detenidos y eso, bajo el dominio del EI, puede significar derechamente la muerte.
Imagen: Reuters
Todo es de Alá, todo es del EI
Pese a la aparente normalidad que podría deducirse al observar estas fotografías, la realidad es bien distinta. Los más jóvenes deben entrenarse en campos militares del EI, los comerciantes deben pagarles un tributo y si los combatientes quieren, pueden llegar a una casa, desalojarla y hacerla propia... Ellos dicen que todo es de Alá, entonces todo es de ellos.
Imagen: Reuters
Jugando con la guerra
Los niños de la foto cargan restos de basura y de un avión de la Fuerza Aérea de Siria abatido en las afueras de Raqqa el pasado 16 de septiembre. Fue la primera vez que los milicianos, usando armas antiaéreas, derribaron a una aeronave de las fuerzas de Bashar al Assad.
Imagen: Reuters
Beneficios para los combatientes
En las localidades controladas por el EI no se puede fumar, escuchar música ni vestir de forma poco recatada. CNN mostraba cómo un hombre increpaba a una mujer en Raqqa, porque podía ver sus facciones a través de su burka. Los combatientes, en cambio, disfrutan de privilegios: cobran un salario, pueden visitar bares y portar armas, imponiendo el terror. "Son una mafia", dice un residente.
Imagen: Reuters
Exhibición de músculo militar
En todas las ciudades conquistadas, los combatientes del EI realizan paradas militares para exhibir su músculo guerrero. Ahí abundan los fusiles de asalto y armas cortas, pero también se les ha visto vanagloriarse de tanques capturados a los Ejércitos de Siria e Irak, así como vehículos blindados e incluso misiles Scud robados de los arsenales iraquíes, país donde incluso han atacado usando cloro.