Fundación alemana negociará para restituir bronces de Benín
29 de junio de 2021
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El consejo de la Fundación Patrimonio Cultural Prusiano (SPK) autorizó este martes (29.06.2021) a su presidente, Hermann Parzinger, a llevar las negociaciones con las autoridades competentes nigerianas para la restitución de los llamados bronces de Benín en manos de los Museos Estatales de Berlín.
"Con el mandato del consejo de la fundación podemos acordar ya pasos concretos y un calendario con la parte nigeriana para llegar a una restitución sustancial", dijo el presidente de la SPK, que engloba a los museos públicos de Berlín, al celebrar la decisión.
Al mismo tiempo, Parzinger subrayó el interés de hablar asimismo sobre las opciones para seguir mostrando los bronces de Benín en Berlín, y en concreto en el Foro Humboldt. "Es el deseo también de todos los implicados en Nigeria. Hemos acordado con nuestros socios nigerianos que continuaremos nuestras negociaciones pronto y en Berlín", agregó en un comunicado.
Así, Parzinger conducirá las negociaciones según lo acordado entre las partes alemana y nigeriana para la devolución de objetos procedentes del Reino de Benín y "expoliadas en el marco de la llamada expedición punitiva británica de 1897, independientemente de las circunstancias de su posterior adquisición por parte de los Museo Estatales de Berlín en el mercado del arte".
Sólo el Museo Etnológico de Berlín cuenta con más de 400 bronces de Benín, algunos de los cuales serán expuestos en el nuevo Foro Humboldt, proyecto cultural recientemente inaugurado y concebido como centro de arte, ciencia, diálogo intercultural y catalizador del debate sobre el colonialismo.
El objetivo del consejo es que las primeras restituciones sustanciales a Nigeria se realicen ya en 2022, tal y como establece la hoja de ruta acordada a finales de abril por las autoridades alemanas competentes y los museos reunidos en el Grupo de Diálogo de Benín.
Uno de los objetivos centrales del Grupo de Diálogo es la creación de un museo real en Ciudad de Benín para reunir de nuevo y exponer de manera permanente los objetos históricos más importantes del Reino de Benín diseminados actualmente por todo el mundo. (EFE)
Obras de arte echadas a perder
La buenas intenciones no bastan para ser restaurador de arte, como se ve en varios casos en España. En otras partes, el personal del aseo también se equivoca. Y hasta el propio artista mutila su obra para "crear".
Imagen: picture-alliance/dpa/Europapress/Sammler
"La Inmaculada del Escorial", malograda por restaurador de muebles
Este es el caso más reciente de daño por "buena voluntad" a una obra. Al menos, a su valiosa réplica, en propiedad de un coleccionista de Valencia. Fue malograda por un reparador de muebles a quien le encargaron restaurarla. La obra "La Inmaculada del Escorial de Bartolomé", de Esteban Murillo, de principios del siglo XX, es la copia del original que se encuentra en el Museo del Prado.
Imagen: picture-alliance/dpa/Europapress/Sammler
"Las pinté porque estaban horrorosas"
Figuras de La Vírgen con el Niño y Santa Ana en madera oscura, obras del siglo XV expuestas en la Ermita de Rañadoiro, en la provincia de Asturias, fueron víctimas en 2018 de los apasionados "restauradores" españoles. Con permiso del párroco, una lugareña de buena fe y sin sentido artístico alguno, decidió "arreglarlas". Restauradores piden a autoridades "cuidar el arte de quienes dicen amarlo".
"Ecce homo": lo desfiguró y encima le pagaron
El rostro de Cristo, pintura del barroco tardío de Elías García, quedó con cabellera de mono, boca difuminada y nariz torcida, resultado de una "restauración" que le causó grandes daños. El caso generó en 2012 una ola mundial de imitaciones en retratos del Rey de España, Michael Jackson y Homer Simpson. Cecilia Giménez, de 82 años, autora del “Nuevo Ecce Homo”, recibió dinero por su uso comercial.
Imagen: picture alliance/dpa/Centro De Estudios Borjanos
Una bañera "sucia"
En 1986, la Academia de Bellas Artes de Düsseldorf presentaba una obra del alemán Joseph Beuys titulada “Bañera anónima”. Esta consistía en una bañera untada de grasa en los bordes. Al ver eso, un empleado de la limpieza creyó tener que lavarla, destruyendo la obra. Beuys fue maestro de la provocación, por eso se cree que pudo haber sido una acción de seguidores de las corrientes más clásicas.
Imagen: picture-alliance/dpa/W. Krumm
"¿Eso es arte o se puede tirar a la basura?"
Joseph Beuys sufrió bastante por el personal de limpieza. Su obra “Fettecke” o Rincón grasiento, fue destruida a ‘fregonazos’, ya que se pensó que los 5 kilos de mantequilla amontonados en una sección del museo no eran más que un acto vandálico. Por esta pérdida artística el Estado de Renania del Norte-Westfalia compensó al autor con 20.000 euros. Solo se rescató esta muestra bajo acrílico.
Imagen: picture-alliance/dpa/R. Vennenbernd
"Niña con globo", de Bansky
La obra del británico Bansky, pseudónimo del artista urbano, estaba siendo subastada el 5 de octubre de 2018 en Londres por un millón de dólares, cuando se empezó a autodestruir. Se activó un mecanismo de trituradora de papel sujeta detrás de su marco, que dejó la obra casi en tiras. Los restos se consideran ahora una obra de arte en sí mismos. Su título: "El amor está en la papelera".
Imagen: Banksy/Girl with Balloon
Bansky: "No fue destrucción, fue creación"
La "inesperada performance" de Banksy "se convirtió al instante en historia del arte mundial", según Sotheby's, que considera que es "la primera vez en la que un nuevo trabajo artístico se crea durante una subasta". Se estima que el valor de mercado del lienzo se duplicó como resultado del impacto que tuvo su destrucción. Que, según Bansky fue "creación".
A pesar de las convenciones en las que se plasma el respeto del arte, en caso de conflictos armados, tanto los ejércitos oficiales como los terroristas siguen destruyendo monumentos y, con ellos, el legado artístico de muchos países. Un ejemplo de ello es esta pintura moderna, destruida por los estadounidenses durante la invasión de Irak en 2003.