“Espíritu emprendedor y amplitud de miras, con frecuencia esas dos virtudes acompañan el inicio de las historias de éxito económico”, destacó el Presidente Joachim Gauck en un encuentro empresarial celebrado en Santiago de Chile, como parte de su gira al país sudamericano.

Gauck indicó que esas virtudes fueron las que inspiraron a comerciantes alemanes en el año 1916, en plena Primera Guerra Mundial, a fundar una cámara de comercio e industria en la ciudad portuaria de Valparaíso, cuando ya se embarcaba para Alemania salitre y cobre por el Pacífico y en sentido inverso llegaban máquinas y medicamentos alemanes a Chile.

Al almuerzo en el Club de la Unión, organizado por la Cámara Chileno-Alemana de Comercio e Industria, Camchal, asistió un centenar de invitados. El Presidente Gauck celebró el lema con que Camchal festeja estos 100 años: uniendo lo mejor de dos mundos. “La Cámara ayudó a consolidar el comercio y los intercambios entre nuestros países. Y creó vínculos que se mantendrían a lo largo de los cien años pasados por encima de crisis económicas y virajes políticos”, subrayó.

Entre las empresas alemanas con presencia en Chile figuran, entre otras, Bosch, Siemens, Bayer, BASF y Henkel. En la balanza comercial de 2015, las exportaciones chilenas a Alemania representaron 1.488 millones de euros, mientras que las importaciones chilenas desde Alemania sumaron 2.393 millones de euros. Los productos chilenos más importantes de exportación a Alemania son minerales, metales y productos agro-alimentarios, mientras que entre los importados desde el país europeo destacan máquinas, automóviles, vehículos y piezas, y productos químicos.

Chile: potencial económico y desafíos

El presidente alemán destacó las fortalezas de la economía chilena y su compromiso con el libre mercado. “Chile posee un potencial económico formidable, entre otras razones porque no ha reaccionado aislándose frente a las crisis y guerras con que nos vemos confrontados en innumerables lugares del mundo”, valoró.

Gauck se refirió también a la actual revisión del Acuerdo de Asociación entre Chile y la Unión Europea, lo cual, en su opinión, “entraña la oportunidad de seguir mejorando las bases del comercio entre ambas partes”.

Asimismo, no obvió las dificultades que enfrenta el país sudamericano, como la caída en los precios del cobre y otras materias primas, y las exigencias que esto impone. “Cada vez más chilenos se percatan de la importancia que tiene para una economía nacional la diversificación de la actividad conómica. Para incrementar su competitividad el país tiene que reducir en mayor medida su dependencia de la minería, impulsar aún más la industrialización y modernizar la producción. Alemania seguirá apoyando a Chile en esta senda de renovación”, aseguró.

Innovación y responsabilidad social

El presidente reconoció que la economía es uno de los pilares de la relación entre Chile y Alemania y debe seguir siéndolo. Gauck respaldó a los inversores alemanes como socios confiables que contribuyen a la innovación en Chile, también a la hora de impulsar cambios estructrales: “Estoy pensando por ejemplo en la implantación de procesos de producción respetuosos con el medio ambiente y la expansión de las energías renovables”.

Gauck valoró la importancia de la confianza entre socios comerciales, asunto que fomentan las cámaras como Camchal, así como la responsabilidad social. “La formación y capacitación profesional de las y los trabajadores es una importante condición previa no solo para el progreso económico sino también para el progreso social, porque abre expectativas de promoción”. El presidente alemán destacó la labor de Camchal en el fomento de la capacitación profesional y de promover en colaboración con socios chilenos algunos elementos del exitoso sistema de capacitación laboral alemán, la formación profesional dual.

Cooperación social

También como ejemplo de responsabilidad corporativa, destacó ante los empresarios el principio de la cooperación social. “En la República Federal de Alemania el diálogo constructivo entre empleadores y sindicatos es desde hace décadas uno de los pilares de la economía social de mercado –apuntó-. La experiencia demuestra que si ambas partes cooperan en pie de igualdad y tratan de alcanzar compromisos conjuntamente, ello no solo redunda en beneficio del éxito económico y del empleo duradero sino que también favorece la paz social y promueve una sociedad civil activa”.

Gauck advirtió, eso sí, que condición previa para ello es que empleadores y trabajadores se acerquen los unos a los otros y busquen el diálogo. El mandatario recordó que los procesos de negociación, aunque laboriosos, merecen la pena.