En términos de protección medioambiental, Turquía se encuentra ante un gran reto. El país se ha propuesto expandir la producción de electricidad, ya que es un bien escaso entre el mar Egeo y el Monte Ararat, y los apagones son muy frecuentes. Nuevas centrales hidroeléctricas se encargarán de solucionar el problema, pero protegiendo el medio ambiente. Hasta el momento, el país aún no aprovecha sus recursos naturales porque a menudo carece de los conocimientos técnicos para el desarrollo y operación de plantas hidroeléctricas modernas que protegen el medio ambiente y no necesitan represas. Precisamente por esta razón, la nueva  planta hidroeléctrica en el este de Turquía tiene capital importancia, junto con un proyecto de alcantarillado nuevo. Global Ideas ha visitado estos proyectos.