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Gigantes ante los tribunales

10 de enero de 2004

Tras las acciones judiciales de los últimos días, el grupo Parmalat sigue destapando sus dudosas conexiones, enfrentándose al proceso de suspensión de pagos. Los tentáculos del gigante también llegan a Alemania.

Calisto Tanzi, el hombre en la sombra.Imagen: AP

La empresa italiana de productos lácteos protagonizó uno de los escándalos financieros más sonados de la economía italiana. La empresa suspendió pagos ante la sorpresa de todo el mundo, y ante las consecuencias, el gobierno italiano tuvo que decretar medidas especiales de emergencia para intentar salvar la solvencia de la empresa de Parma. El fundador y ex presidente de la corporación fue detenido y encarcelado.

Todo comenzó con un repentino descenso del valor de las acciones de la compañía tras el anuncio de un desfalco de 4.000 millones de euros, destapando así la precaria situación financiera de la multinacional italiana. Acto seguido el gobierno italiano inició las acciones para intentar salvar la situación de la compañía y evitar así consecuencias fatales, como la pérdida de 35.000 puestos de trabajo. De acuerdo con las leyes italianas de bancarrota, Parmalat fue colocada bajo la autoridad de un nuevo consejo de administración para intentar salvar el cuello.

Los responsables del proceso de suspensión intentan ahora reunirse con las instituciones financieras que apoyaban al grupo, para lograr una solución digna. Para garantizar la continuación de la empresa en los próximos meses son necesarios entre 50 y 100 millones de euros.

Red mundial de falsas finanzas

Tras la citación de varias instituciones financieras, ahora le toca el turno al Deutsche Bank. Existen sospechas de un comportamiento ilícito por parte del banco. Los representantes del banco ya tienen una cita ante los tribunales, pero se trata sólo de un intercambio de información referente a la red financiera del consorcio, según manifestó un portavoz del Deutsche Bank. La pregunta que se hacen los administradores del proceso es la siguiente: ¿Por qué duplicó el banco alemán su participación en la empresa italiana cuando ya se conocía su situación de insolvencia? El banco declaró a este respecto que se trata sólo de una operación de crédito realizada por la entidad para un cliente. El banco se apropió provisionalmente del capital pero es el cliente, él que ha de soportar los riesgos financieros.

Las vacas de parmalat se quedaron en "vacas flacas".Imagen: AP

La justicia italiana intenta aclarar la dudosa emisión de bonos, controlada por grandes bancos de Estados Unidos y Europa, justo antes del proceso de suspensión, y el conocimiento que dichos bancos tenían de la situación financiera de la compañía de lácteos.

En definitiva, si los bancos promovieron la compra de bonos a pesar de conocer el estado de las cuentas de la corporación. Las acciones judiciales no sólo se dirigen a los bancos sino que también llegan a los auditores de cuentas como Deloitte & Touche y Grant Thornton, que dieron el visto bueno a los balances de Parmalat.

El fundador de la compañía, Calisto Tanzi, se encuentra en prisión a la espera del proceso. Esta acusado de bancarrota fraudulenta, fraude y falsificación de balances. Al directivo se le responsabiliza directamente del desvío de 500 millones de euros. El agujero total en las cuentas de la compañía asciende ya a los 8.000 millones de euros. El escándalo de Parmalat ya ha sido considerado como el más grande de la historia de las empresas europeas.