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Mayor paquete de ahorro en la historia de la República Federal de Alemania.

7 de junio de 2010

En “un esfuerzo extraordinario”, el Estado alemán ahorrará más de 86 mil millones de euros hasta 2014. Los recortes afectarán sobre todo al gasto social: menos dinero para padres, desempleados y funcionarios públicos.

La canciller, Angela Merkel, lamentó los recortes en los subsidios para padres.Imagen: AP

Tras dos días de reunión para decidir sobre el presupuesto estatal de 2011 y proyectar el marco financiero hasta 2014, el Gobierno de Berlín ha respondido a la pregunta sobre dónde y cómo ahorrará para cumplir con su obligación constitucional de reducir el déficit fiscal de la nación: los alemanes deben apretarse el cinturón en los próximos cuatro años, en un “esfuerzo extraordinario” para asegurar su propio futuro económico – anunció en Berlín la canciller, Angela Merkel (CDU), en rueda de prensa ofrecida junto al Vicecanciller, Guido Westerwelle (FDP).

El plan de recortes afectará especialmente al gasto social, aunque también se anunciaron medidas para el sector empresarial. La coalición de gobierno de conservadores y liberales prevé ahorrar al menos 11.200 millones de euros (unos 13.200 millones de dólares) en el presupuesto de 2011, cifra que se irá elevando escalonadamente hasta alcanzar los 26.600 millones de euros en 2014. Otros 5.600 millones de euros se agregarán en este último año, provenientes de medidas aún por precisar, con lo que deben ahorrarse en total más de 86 mil millones de euros (casi 100 mil millones de dólares).

El Vicecanciller y ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, dijo que el programa de ahorro es “equilibrado, justo y proporcional”.Imagen: AP

Educación, investigación e impuestos: ¿intocables?

Se salvan de los recortes – según declaraciones de la canciller – los gastos de educación e investigación, así como los de infraestructura. Tampoco se tocarán las jubilaciones. El vicecanciller, Guido Westerwelle, por su parte, insistió en que no se crearán nuevos impuestos, ni habrá incrementos en los actuales impuestos sobre la renta o sobre el valor añadido de los alimentos o bienes culturales (IVA), ni en el llamado impuesto “de solidaridad” de los Estados del oeste con los del este. Este había sido un tema de disputa entre conservadores y liberales antes de la reunión.

Menos para desempleados, padres, administración del Estado y Fuerzas Armadas

Tal y como se filtrara antes de la clausura del cónclave presupuestario, los recortes afectarán fundamentalmente las carteras de Trabajo, Familia y los gastos administrativos del Estado. Sólo en 2011, con la anulación de medidas obligatorias (que se consideran ineficaces) para la reintegración laboral de los desempleados, deben ahorrarse aproximadamente 500 millones de euros. Las medidas se aplicarán en el futuro a discreción de la Agencia Federal de Empleo.

El Gobierno plantea además una reducción de dos puntos porcentuales en el subsidio por hijo para padres con ingresos netos a partir de 1.240 euros: el suplemento se moverá de un 67 a un 65 por ciento del salario. Quienes reciben subsidio completo de desempleo (Arbeitlosengeld II) no recibirán subsidio por hijos o suplemento de jubilación. Se eliminarán también los extras por costos de calefacción.

Se ahorra en puestos y remuneración para funcionarios públicos, en subvenciones para padres y desempleados.Imagen: picture alliance/dpa

Los puestos para empleados públicos deberán reducirse en 10.000 y los funcionarios deberán enfrentar además un recorte del 2,5 por ciento de su remuneración (que se instrumentará eliminando el incremento del pago adicional de Navidad en 2011). Otros 400 millones de euros se ahorrarán, adicionalmente, al quedar pospuesta la reconstrucción del antiguo palacio prusiano de Berlín, donde antes estuvo el Palacio de la República de Alemania oriental.

Adicionalmente, las Fuerzas Armadas deben ahorrar hasta mil millones de euros, pero las reformas estructurales anunciadas para este sector quedaron pendientes por el momento. El ministro de Defensa, Karl-Theodor zu Guttenberg (CSU) tiene ante sí “un enorme encargo”, dijo Merkel. Guttenberg deberá comprobar, antes de septiembre, si los efectivos pueden reducirse de los actuales 250.000 a 40.000. La discusión sobre el servicio militar obligatorio, que los liberales apuestan por eliminar del todo pero los conservadores plantean reducir de 9 a 6 meses, quedó también pendiente.

El aporte del sector empresarial

Unos 5 mil millones de euros debe ser el aporte de la economía al programa de ahorro estatal. El Gobierno prevé eliminar las rebajas a los impuestos sobre el consumo de energía e imponer una tasa ecológica nacional al tráfico aéreo (para todos los despegues desde aeropuertos alemanes), así como impuestos a los mercados financieros. Los concesionarios de las plantas de energía nuclear deberán contribuir con 2.300 millones de euros al año (unos 2.700 millones de dólares), para equilibrar las ganancias que presuntamente les reportará la posposición de la fecha de cierre de estas plantas.

Críticas de la oposición

En las filas de los socialdemócratas (SPD), Los Verdes y la Izquierda el programa de ahorro del gobierno tropezó con duras críticas. El jefe del SPD, Sigmar Gabriel, dijo que casi la mitad de la cifra a ahorrar recaerá sobre los desempleados, que las medidas no impulsan inversiones privadas y comunales adicionales, y que el incremento de los impuestos a las centrales nucleares sólo trata de justificar la decisión “insegura” de alargar su cierre.

Claudia Roth (Los Verdes) dijo que este es un “programa de activa protección a la riqueza”.Imagen: picture-alliance/ dpa

También la líder de Los Verdes, Claudia Roth, reiteró la oposición de su partido a la concesión de más tiempo de vida a las centrales nucleares y criticó el programa de ahorro del Gobierno como un “programa de activa protección a la riqueza”, que pone el acento de los recortes sobre los más pobres.

El jefe de la fracción parlamentaria de La Izquierda, Gregor Gysi, llamó a la población a una “amplia oposición pública” al paquete de medidas y declaró que la coalición de Gobierno “deja sangrar a los jubilados, los desempleados, los socialmente desfavorecidos y las familias, por el juego de bancos y especuladores”.

En el trasfondo de estos recortes el Gobierno alemán ha aludido a la crisis del euro y la casi bancarrota griega. Ellas han demostrado la importancia del saneamiento de las finanzas estatales, dijo Merkel este lunes en Berlín. En nombre de la coalición de Gobierno, el vicecanciller y ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, calificó programa como “equilibrado, justo y proporcional”.

Autora: Rosa Muñoz Lima / dpa/AFP/Reuters

Editora: Emilia Rojas Sasse

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