La apuesta del Gobierno alemán apunta a retirar la licencia de armas a individuos identificados como neonazis y también sofocar las fuentes de financiación de sus organizaciones y de esta forma desarmar a esa facción.

"Tenemos que reforzar la seguridad interna de nuestro país", afirmó la ministra del Interior, Nancy Faeser, tras aludir a la amenaza que supone para la paz en el conjunto de Europa la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

Según estimaciones de los servicios secretos de Interior, en el país hay unos 13.800 ultraderechistas dispuestos a la violencia, de los cuales unos 1.500 tienen licencia de armas.

El propósito de Faeser es mejorar la coordinación entre las informaciones recabadas por la inteligencia alemana, con las fuerzas policiales y la autoridad que gestiona las licencias de armas para proceder a desarmar a estos individuos. La ministra se propone, según el plan de acción de diez puntos presentado hoy (15.03.2022), ahogar las fuentes de financiación de las llamadas camaraderías neonazis, grupúsculos sin estructura de partido y activos solo a escala regional o local, pero vinculados entre sí a través de redes nacionales o internacionales. (efe)