La película fue presentada en la villa de Goebbels, actualmente abandonada, en las cercanías de Berlín. La cinta se estrenará en invierno en Alemania y sacará a la luz algunos puntos oscuros del régimen de Hitler. Se trata de un documental histórico elaborado en base a las citas de Joseph Goebbels en su diario e imágenes históricas del régimen nacionalsocialista. La cinta es el fruto de 10 años de trabajo del director Lutz Hachmeister en los que consiguió hilvanar imágenes y citas para crear “Goebbels Experiment”.

La propaganda del régimen

Goebbels fue una de las figuras cruciales durante el III Reich. Tras licenciarse en filosofía en la Universidad de Heidelberg, pasó a integrar las filas del partido. Posteriormente fue el editor del periódico nazi “Der Angriff” y jefe del partido en el estado de Brandenburgo. Con la subida de Hitler al poder se convirtió en ministro de Instrucción Pública y de Propaganda. Sus campañas contra los judíos y contra la Iglesia católica demostraron la capacidad propagandística del dirigente nazi y el alto grado de persuasión logrado por su organización.

Autocompasión y odio

Sin embargo, pese a su fuerte personalidad y poder de persuasión, la autocompasión del autor es uno de las constantes del diario. Goebbels se muestra en sus notas como un joven infeliz. Según su diario, antes de que Hitler subiese al poder, todo lo que hacía acababa mal. A pesar de eso, el joven Goebbels escala en la jerarquía social y aparece como orador en el mitin del partido en el bajo Rin.

La razón de este ascenso se deduce del diario. Siente más odio que cualquier otro. Odia a los judíos y a los pastores cristianos, odia a los otros partidos que le hacen la competencia al Partido Nacionalsocialista (NSPD). La película muestra la imagen de Goebbels en el palacio de deportes con el brazo en alto mientras sonríe y dice:”Alguna vez acabará nuestra paciencia y conseguiremos cerrarles a los judíos su boca de mentirosos”. Él es el intelectual superior que incluso se permite despreciar a las bases del partido.

La adoración de Hitler hasta el último día

Las intrigas y acuerdos secretos contra su persona eran otros de los temas, o temores, que se deducen de sus escritos. Incluso desconfiaba del propio Hitler, por otra parte, un ejemplo a seguir. Su admiración por el Führer no deja lugar a dudas sobre la fascinación de Goebbels por el líder. Talento mesiánico, gestos, retórica, mímica,… todas éstas son las cualidades por las que Goebbels admira a Hitler como un ser superior.

Con la II Guerra Mundial, la influencia de Goebbels llegó a la cumbre. Era, como se refleja en la película, el mayor partidario de la guerra total, y mantuvo al pueblo alemán convencido de la victoria, incluso cuando ya se vislumbraba la caída del régimen. Su pasión por el líder le llevó a terminar sus días junto a su familia en el bunker de Hitler, donde envenenó a sus hijos y se suicidó poco antes de la caída de Berlín.

La película nos muestra una cara desconocida del dirigente nazi más influyente. Un Goebbels quizas distinto al que estamos acostumbrados a ver, pero no por eso libre de culpa en uno de los mayores desastres humanos de la historia.