Grecia: líder de Amanecer Dorado testifica por primera vez
6 de noviembre de 2019
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El líder y fundador del partido neonazi griego Amanecer Dorado, Nikos Mijaloliakos, testificó por primera vez en el macrojuicio que desde hace más de cuatro años intenta dilucidar si la formación es en realidad una banda criminal culpable de varios asesinatos.
Nada mas comparecer Mijaloliakos se declaró inocente de los cargos de dirección y pertenencia a una banda criminal e instigador moral de asesinato y afirmó que es la primera vez que "el líder de un partido político es juzgado por acciones cometidas por un simpatizante del partido".
El negacionista del Holocausto es uno de los 68 políticos y militantes que se enfrentan a penas de entre 5 y 20 años de prisión. La investigación judicial comenzó tras el asesinato del cantante antifascista Pavlos Fyssas, en septiembre de 2013, a manos del militante neonazi Yorgos Rupakiás, quien a lo largo del proceso confesó los hechos.
El mismo Mijaloliakos reconoció poco después del suceso la "responsabilidad política", pero no la "penal", de su partido en el asesinato del joven rapero. Sin embargo, durante su declaración cuestionó el significado de esta responsabilidad y aseguró que fue una forma de hablar, pero que ello no significa que lo matara.
En el acta de acusación, además del asesinato de Fyssas, se incluyen el de un inmigrante paquistaní, el ataque ocurrido en agosto de 2013 a un grupo de militantes del sindicato comunista PAME, así como varias agresiones a trabajadores inmigrantes y a sedes de colectivos izquierdistas y anarquistas.
En los alrededores del tribunal unas mil personas se manifestaron contra Amanecer Dorado y el fascismo portando pancartas con mensajes como "Cadena perpetua para los neonazis", "Pavlos está vivo. Aplastad a los nazis" o "Lucha contra el racismo y los fascistas".
En su mejor momento Amanecer Dorado se alzó como una alternativa a los partidos tradicionales, que los griegos veían como el origen de un sistema clientelista y altamente corrupto muy relacionado con la crisis económica y social. El partido combinaba actividades sociales que les granjearon gran simpatía, como el reparto de comida entre los más golpeados por la crisis -aunque sólo si eran griegos-, con un fascismo nada sutil.
El Tribunal se ha reunido unos 400 días, ha escuchado a 350 testigos y otras tantas cientos de horas de grabaciones pero parece que por fin este año podrá llegar a una conclusión. (efe)
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La escena de los crímenes de la NSU
La conmoción continúa: la exposición "Suelo sangriento" (Blutiger Boden) en el museo Rathausgalerie, de Múnich, muestra imágenes abrumadoras de los crímenes de los terroristas de extrema derecha de la NSU en Alemania.
Imagen: Regina Schmeken, 2013
Enver Şimşek, 09.09.2000, Núremberg
Enver Şimşek, de 38 años, fue la primera víctima del terrorismo neonazi de la célula NSU en Alemania. Fue hallado en junto a una ruta con varias balas en la cabeza y murió dos días después. Regina Schmeken comenzó a fotografiar los lugares de los crímenes de la NSU y los visitó varias veces en 2016. Sus fotografías se exhiben en la Rathausgalerie de Múnich, desde el 17.07.2018 hasta el 29.10.2018.
Imagen: Regina Schmeken, 2015
Süleyman Taşköprü, 27.06.2001, Hamburgo
El vendedor de verduras y frutas turco Süleyman Taşköprü, de 31 años, yacía tirado en un charco de sangre cuando su padre lo encontró. Murió poco después. La fotógrafa Regina Schmeken dice que muchas veces es como si en ese lugar el suelo la arrastrara hacia abajo. Después de 14 años del crimen, las baldosas siguen siendo las mismas.
Imagen: Regina Schmeken, 2015
Mehmet Turgut, 25.02.2004, Rostock
Aquí murió Mehmet Turgut, de 25 años. Trabajaba como ayudante en un puesto de comida, cuando los asesinos de la célula terrorista de extrema derecha NSU le dispararon un tiro en la cabeza. En su exposición, Regina Schmeken quiere hacer un homenaje a la memoria de las víctimas enfrentándose a los lugares donde fallecieron y donde ya no quedan huellas de esos crímenes.
Imagen: Regina Schmeken, 2013
Ataques con bombas de clavos, 09.06.2004, Colonia
En la calle Keupstraße de Colonia, la explosión a control remoto de una bomba con clavos hirió a 22 personas, a cuatro de ellas gravemente. El atentado terrorista neonazi de la NSU conmocionó al barrio de Mülheim, conocido por sus negocios turcos y kurdos. La Policía creyó durante mucho tiempo que el ataque era producto de la rivalidad de bandas familiares turcas.
Imagen: Regina Schmeken, 2013
Theodoros Boulgarides, 15.06.2005, Múnich
La séptima víctima del terrorismo de extrema derecha de la NSU fue Theodoros Boulgarides, un griego que fue ejecutado de tres disparos en la cabeza. En sus imágenes, Regina Schmeken incorporó escenas de la vida cotidiana. Con eso quiso dejar en claro que los asesinatos perpetrados por los neonazis pueden suceder en cualquier lugar.
Imagen: Regina Schmeken, 2013
Halit Yozgat, 06.04.2006, Kassel
En esta casa, Halit Yozgat, de 21 años, nacido en Kassel, tenía un cibercafé, hasta que un día de junio de 2006, los criminales de extrema derecha acabaron con su vida ejecutándolo a tiros. Como todas las víctimas de la célula terrorista neonazi NSU, fue hallado desangrado en el suelo. Murió en los brazos de su padre.
Imagen: Regina Schmeken, 2015
Michèle Kiesewetter, 25.04.2007, Heilbronn
La mujer policía Michéle Kiesewetter, de 22 años, fue asesinada de un tiro en la cabeza dentro de su automóvil de servicio en la Theresienwiese, un descampado de la ciudad de Múnich. Fue la décima y última víctima de los asesinatos perpetrados por los terroristas de la NSU. La exposición de las fotografías de Regina Schmeke quiere dejar en claro que esos crímenes no serán olvidados.