Grecia vuelve a conjurar el peligro de una quiebra
20 de mayo de 2017Con un nuevo recorte a las pensiones y una drástica reducción de la base imponible, el Gobierno griego realizó en la noche del jueves (18.5.2017) un nuevo esfuerzo para atender las demandas de sus acreedores y alejar el fantasma de la quiebra. La población griega tiene que prepararse ahora para tiempos aún más difíciles, aunque las nuevas medidas de austeridad adoptadas, por un volumen de 4.900 millones de euros no se aplicarán hasta 2019. La aprobación del paquete por el Parlamento en Atenas generó opiniones encontradas.
Mientras que el periódico liberal "Eleftheria" habló de "medidas catastróficas" que tendrán consecuencias desastrosas para las clases medias, el rotativo "I Avgi", afín al Gobierno, llamó a todas las partes implicadas en la crisis griega a actuar ahora con sentido de la responsabilidad. Lo importante ahora, señaló "I Avgi", es que los acreedores lleguen a un acuerdo sobre si se se debe reducir –y cómo– la enorme deuda del país. Todavía hay discrepancias entre los acreedores europeos y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Desde hace meses, el FMI asegura que la deuda griega, que actualmente supone casi el 180 por ciento del producto interior bruto (PIB) del país, es insostenible. Los acreedores europeos, en cambio, no están dispuestos a discutir sobre una quita de la deuda hasta junio de 2018, es decir, cuando expire el actual programa de rescate. El primer ministro griego, Alexis Tsipras, insiste en que también los acreedores deben hacer concesiones, y rápidamente.
El jefe de Gobierno hizo saber en la noche del jueves que Atenas espera que se tome una decisión sobre la solución del problema de la deuda griega en la reunión que mantendrá el lunes (22.5.2017) en Bruselas el Eurogrupo, que reúne a los ministros de Finanzas de la eurozona. (dpa)