La gripe aviar ha llegado a Alemania. Lo que después de los casos detectados en Italia, Grecia y España era un temor, se ha vuelto una certeza. Si bien las autoridades y los institutos correspondientes declaran haber tomado providencias y estar preparados para afrontar esta anunciada llegada de la variante H5N1 del virus de la gripe aviar, el estado de alarma cunde en el país.

Medidas vigentes

Aunque aún se espera la confirmación oficial definitiva, que vendrá del laboratorio de la Unión Europea localizado en Weybridge (Inglaterra), las autoridades germanas han puesto en práctica las medidas decretadas por la Unión Europea. Éstas incluyen el establecimiento de una zona de protección de tres kilómetros en torno al sitio del hallazgo y otra de vigilancia en un radio de 10 kilómetros. Se ha empezado, también, a realizar inspecciones y exámenes médicos en las granjas avícolas de la región. Así mismo, la prohibición de vender carne, huevos y productos de aves, así como mercados y exposiciones avícolas rige desde hoy en la zona de 10 kilómetros por 21 días. Por otro lado, a nivel federal, rige a partir del viernes (17.02.06) que las aves de corral no puedan estar al aire libre.

Evitar la pandemia

En primera instancia, se trata de no escatimar esfuerzos para que el letal virus no se propague entre las aves. En segunda instancia, para que no haya contagio ave-ser humano. Para esto último, las medidas sanitarias a nivel local son tan básicas como urgentes. Hasta el momento la cepa del virus H5N1 se transmite entre las aves, de las cuales, según información del Instituto Friedrich Loeffler para Veterinaria, los cisnes parecen ser la presa más fácil. Por contacto con excrementos y fluidos, la mortal cepa se transmite al ser humano. Este contagio, que se ha cobrado numerosas vidas humanas, es el más peligroso para el hombre, pues es latente el peligro de que el virus mute y pueda ser transmitido entre seres humanos. En ese caso, la gripe aviar podría convertirse en una pandemia mortal.

Esfuerzos a todo nivel

En el foro realizado en Pekín -con auspicio de Unión Europea, China y el Banco Mundial- se logró recaudar fondos para combatir la gripe aviar. Éstos están destinados a la investigación y desarrollo de una vacuna, a equipos de laboratorio y a campañas de información, sobre todo en los países más afectados.

Si las víctimas humanas hasta el momento llegan al centenar, las vidas aladas que se ha cobrado "la gripe del pollo" -sea por contagio o por medida de seguridad- se cuentan en millones. El que sean las aves migratorias las que propagan el virus hace muy difícil una erradicación del mal. Evitar y prevenir el fácil contagio entre aves migratorias y aves de corral supone un esfuerzo aún mayor en las amplias regiones, cuya economía se basa en el ramo agropecuario supone un también un esfuerzo económico adicional tanto para los Estados como para la comunidad internacional. Y equipara, en realidad, el evitar el contagio ave-hombre al grado de información y conciencia del ciudadano.