1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Gripe aviar en las Américas: el número de brotes aumenta

José Ospina-Valencia
24 de febrero de 2023

Si bien no afecta mayormente a los humanos, sí mata a millones de aves. Ya ha saltado a 19 especies. La gripe aviar puede convertirse en amenaza para las economías de América Latina.

Una colonia de pelicanos en la costa del Perú
Los pelicanos son los mayores transmisores del virus del actual brote de gripe aviar Imagen: Loop Images/picture alliance

Desde Camboya, se reportó el 23 de febrero de 2023 la muerte de una niña, víctima de la gripe aviar, más exactamente por el virus A H5N1. En América Latina, la Organización Mundial de la Salud (OMS) registró el contagio de otra niña el pasado 9 de enero en la provincia ecuatoriana de Bolívar. Ya en abril de 2022, en Estados Unidos, se detectó la infección en un obrero.

"El virus puede - y hay casos, aunque esporádicos - brincar de las aves a los humanos”, explica a DW Montserrat Arroyo Kuribreña, Directora General Adjunta para Estándares internacionales y Ciencia de la Organización Mundial de la Sanidad Animal (OMSA), con sede en París, quien pone en cifras las dimensiones de la expansión del A H5N1: "Entre octubre de 2021 y el 16 de febrero de 2023, a nivel mundial, ha habido unos 4.946 brotes reportados y más de 252 millones de aves afectadas, mientras los casos de transmisión a humanos son contados”. 

Las aves de corral se erizan, ponen huevos sin cáscara y mueren en menos de 48 horas. El virus de la influenza aviar es uno de los más mortíferos. Su alta resistencia, tanto a bajas como a altas temperaturas, lo convierte en uno de los más resistentes patógenos: el virus A H5N1 puede sobrevivir entre 105 y 200 días.

La vacunación oportuna es la clave

"El A H5N1 ha cruzado además, la barrera de la especie”, explica a DW Jorge Luis Hernández, profesor de Salud Pública de la Universidad Los Andes de Colombia. En efecto, en varios países de América Latina, aves migratorias han contagiado a cerdos y hasta leones marinos. "Hay unas 19 diferentes especies en las que se ha detectado, pero la más común actualmente son los pelícanos”, confirma a DW la científica mexicana Arroyo Kuribreña. 

El A H5N1 se está expandiendo rápidamente desde finales del 2022 por el continente. Aunque la OMSA habla de 11, reportes de prensa cuentan 17 países con contagios de aves y otras especies: Argentina, Uruguay, Chile,Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia, Panamá, Venezuela, Bolivia, Costa Rica, México, Honduras, El Salvador, Cuba, Estados Unidos y Canadá. Chile y Perú registran más de 70 mil muertes de aves y los primeros casos de traspaso de la gripe aviar a lobos marinos.

En Perú, medios reseñan la muerte de cientos de lobos marinos en las playas desde enero. Un equipo científico ha confirmado que el culpable del brote es el salto del virus de la gripe aviar A H5N1 a estos mamíferos. 

Según el epidemiólogo Hernández "Hay que reforzar toda la estrategia frente a la influenza, que incluye vigilancia epidemiológica y vacunación de aves, pero también de personas”. Tras la pandemia, Latinoamérica se encuentra rezagada, critica el científico colombiano, quien advierte que "en la región, la vacunación de aves es hoy menor del 20 por ciento”.

Impacto económico: industria avícola en riesgo

Aparte de los problemas sanitarios, la lucha contra la influenza aviar tiene una relevancia alimenticia y económica en América Latina. ¿Qué tan grande es su impacto?

"Es grande, porque la gripe aviar ataca las aves de granja o de corral para la producción, afectando la economía y alimentación de la población”, agrega el epidemiólogo Hernández, quien recomienda la rápida ubicación de focos y la estricta separación de las aves de corral de las silvestres”. La clave del freno a los brotes de gripe aviar sigue siendo, según el doctor Hernández, la vacunación temprana de las aves, de acuerdo a los picos indicados por FluNet, en el Sistema de Vigilancia y Respuesta Global a la Influenza de la OMS (GISRS).

Granja avícola en Cali, ColombiaImagen: AFP/Getty Images

"El impacto de un brote de gripe aviar puede ser bastante grande en la industria, debido a la muerte de las aves de corral, la pérdida de empleos, el alza de precios y el comercio internacional. Pero un brote de gripe aviar también puede afectar la opinión pública y el turismo”, agrega, por su parte, la experta de la OMSA. La República Argentina es, por ejemplo, el octavo mayor productor, e igualmente, el octavo exportador de carne de pollo del mundo, según el Servicio argentino Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria. Otros países como Colombia, Perú, Chile y México son también grandes productores y consumidores de carne de pollo y huevos.

En lo que concierne a América Latina, la veterinaria de la OMSA, recuerda en DW que entre 2021 y 2023, "mientras en aves silvestres se han detectado 121 brotes, 33 han afectado la producción avícola”. El problema es que un solo brote puede matar a toda la población avícola de una región o empresa.

El cambio climático: ¿un factor en la gripe aviar?

Los científicos ya observan, empero, que el comportamiento del virus parece estar cambiando, así como que los brotes son más frecuentes. "Esto puede deberse a la evolución del virus, que puede mutar y  recombinarse genéticamente, lo que incrementa el riesgo de que se vuelva más transmisible o más patógeno”, agrega Arroyo. Por eso, la representante de la OMSA insta a los países a "mantener una buena vigilancia y notificar rápidamente los casos detectados”.

También en las Américas las épocas de lluvias y sequías son más largas e intensas. ¿Puede ser el calentamiento global el factor que está haciendo crecer la frecuencia de los brotes de gripe aviar? La Directora General Adjunta para Estándares internacionales y Ciencia de la OMSA, Montserrat Arroyo Kuribreña, cree que los cambios pueden radicar en la combinación de varios mecanismos: "Ha habido bastantes cambios en las formas en las que se crían las aves de corral. Han subido las temperaturas que obligan a las aves migratorias a alterar sus patrones de migración. Hay un incremento en la movilización entre países, tanto de animales como de humanos. Al final, cambian las rutas migratorias y quizás las aves tienen más contacto directo con aves domésticas. Todo esto puede ayudar a incrementar el riesgo".

(ms)

Ir a la siguiente sección Descubra más
Ir a la siguiente sección Tema del día DW

Tema del día DW

Ir a la siguiente sección Más de DW