Juan Guaidó fue recibido casi con júbilo en Bruselas. Si bien no hubo alfombra roja, no cabe duda del apoyo al presidente interino en cuanto a lograr una solución para la insostenible situación venezolana.
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"Si tenemos que saltar muros, lo haremos. Si hay que empujar puertas, también”, dijo Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional venezolana y reconocido por la Eurocámara como presidente interino de Venezuela.
Ante una sala de prensa inusualmente llena cuando se trata de temas latinoamericanos, el líder opositor habló de la situación en su país, de la crisis humanitaria, de la falta de agua, de los ataques a la Asamblea Nacional. También de la convocatoria a elecciones que hizo Nicolás Maduro hace diez días: "Para que haya elecciones libres debe haber condiciones, con un tribunal electoral independiente. Lo que proclama Maduro es para confundir a la comunidad internacional”, respondió Guaidó.
Si bien no hubo entrada por la alfombra roja –reservada para los jefes de Estado- fue recibido en Bruselas con el apoyo de cuatro grupos políticos: la derecha, la ultraderecha, liberales y socialistas. En el podio hubo representantes de todos esos partidos.
En clave española
La ausencia de la izquierda –en coalición con los socialistas en el nuevo gobierno español- fue explicada así: "no podemos sino sorprendernos por la comodidad con la que grupos que se pretenden progresistas comparten postura e incluso firman documentos conjuntos con la extrema derecha”.
Guaidó mismo no quiso entrar en la polémica de si sería el jefe de Gobierno español, Pedro Sánchez, o sólo la ministra de Exteriores quien lo recibirá en Madrid. "Hacer una agenda con España”, es lo que subrayó como prioridad para su encuentro en Madrid.
Sanciones individualizadas a los miembros del gobierno y cerrar la entrada al oro venezolano a territorio europeo están entre las medidas que el líder opositor identifica como un mayor aporte de la UE.
"Sobre esta cuestión existe una mayoría muy amplia en la Eurocámara. Va desde posturas conservadoras y muy conservadoras hasta posturas progresistas. Y en este caso prima pensar en Venezuela, en la situación que padece”, dijo a DW Javi López, presidente de la Asamblea EuroLatinoamericana.
¿Salida furtiva, regreso peligroso?
Desde que el lunes (20.01) se comenzara a rumorear "¡viene Guaidó!” todo fue confusión. Las agendas no estaban claras: se sabía que se encontraría con Josep Borrell, Alto Representante de la Politica Exterior de la UE. Pero del encuentro no se supo más que vaguedades. También del que mantuvo con el comisario para Modo de Vida Europeo y Migración, Margaritis Schinas. Los nuevos fondos europeos para ayudar a afrontar la crisis migratoria en la región podrían ser el motivo de esa reunión.
La salida de Guiadó a través de Colombia –aunque pesa sobre él una orden de no abandonar el país- dotó de emoción el encuentro con los europeos.
"En Venezuela hay un riesgo de salir, de entrar. Son millones los que caminan por la frontera. Mi vuelta a Caracas va a ser un riesgo, como la venida, pero no es diferente a la de Rubén González, Gilbert Cabras, o la de Ismael León, secuestrado ayer. Es el riesgo de todos por hacer vida pública en Venezuela. Lo asumimos con responsabilidad entendiendo que debemos cuidar de poder regresar de manera segura”, afirmó Guaidó.
Los aplausos siguieron varias veces a su alocución. El encuentro fue en la sala de prensa, aunque no sólo la prensa estaba presente. Eurodiputados de todas las fracciones, diplomáticos y organizaciones de la sociedad civil concurrieron a la cita. También representantes de la inmigración venezolana, que aprovecharon la oportunidad de entregarle una carta a Juan Guiadó, recordándole que cuando haya elecciones, ellos –residentes en más de doce países de la UE- quieren estar representados en el censo.
"Esta visita es otra oportunidad para enviar un mensaje claro mostrando nuestro apoyo no solo al presidente Guaidó, sino a través de él a todos los representantes elegidos democráticamente en Venezuela”, dijo a DW Dita Charanzová, del grupo liberal, y vicepresidenta del Parlamento Europeo, quien extendió a Juan Guaidó la invitación.
"El reconocimiento internacional es importante para que Maduro entienda que no tiene más remedio que negociar con Guaidó. Creo que viene en un momento oportuno y clave para el futuro de Venezuela”, subrayó Charanzová, encargada de las relaciones con América Latina.
"Hace un par de años queríamos cambio; hoy lo necesitamos. El apoyo del mundo va a ser fundamental”, concluyó Guaidó.
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