Guaidó: la vida de Édgar Zambrano "corre peligro" en prisión
20 de julio de 2019
El primer vicepresidente de la Asamblea Nacional venezolana lleva diez días en huelga de hambre.
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El líder del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, afirmó este viernes (19.07.2019) que, tras diez días en huelga de hambre, "corre peligro" la vida del directivo de la Cámara Édgar Zambrano, quien permanece detenido desde inicios de mayo pasado acusado de apoyar un fallido levantamiento militar contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Durante una asamblea con las comunidades del estado de Nueva Esparta (norte), Guaidó afirmó que "hoy corre peligro la vida" de Zambrano, el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN), quien inició la huelga de hambre hace 10 días para exigir a las autoridades judiciales "la liberación inmediata" de cuatro de sus colaboradores, apresados en el mismo procedimiento que lo llevó a la cárcel.
Guaidó resaltó que Zambrano "nunca ha debido estar secuestrado" y que inició la protesta por "un noble petitorio", que liberen a "los que secuestraron con él", a quienes consideró "presos políticos".
Según informó el jueves la parlamentaria Delsa Solórzano, el diputado Zambrano también reclama el acceso a sus abogados y visitas familiares. "Nadie hace una protesta, una marcha, tranca una calle para morir ni por gusto. Al contrario, lo hace para vivir con dignidad", dijo Guaidó.
El líder del Parlamento, quien es reconocido como presidente encargado de Venezuela por más de 50 países, entre ellos Alemania, advirtió a sus seguidores de que "van a venir días duros" y acotó que "no hay soluciones mágicas".
La Eurocámara pide más sanciones a Maduro
03:08
El parlamentario señaló que continúa su lucha por desalojar a Maduro del poder "en todos los terrenos", y dijo que es necesaria "la presión ciudadana, diplomática y mundial" para "superar esta crisis y atender la emergencia" de que padecen los venezolanos.
Guaidó manifestó que el informe sobre los derechos humanos que elaboró la alta comisionada de Naciones Unidas para los derechos humanos, Michelle Bachelet, advierte que en casos de violaciones a derechos fundamentales la responsabilidad no solo recae en "el que ejecutó la orden" o "el que dio la orden", sino además en el funcionario que "no hizo nada para prevenirlo".
eal (efe, efectococuyo.com)
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Los venezolanos encuentran refugio y solidaridad en Colombia
Maicao es famosa por su tráfico de drogas y personas, violencia y explotación sexual. Los refugiados venezolanos que viven allí son un blanco fácil. Pero un centro de recepción dirigido por ACNUR ofrece una salida.
Imagen: DW/Eline van Nes
Esperar en fila por comida
Los migrantes venezolanos hacen fila para verificar su número de registro y otros detalles antes de recibir su almuerzo. El Programa Mundial de Alimentos de la ONU sirve comida tres veces al día.
Imagen: DW/Eline van Nes
Un techo en circunstancias difíciles
Filas de carpas provistas por la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) se extienden para los venezolanos migrantes en el centro de recepción en Maicao y brindan la mayor comodidad posible en estas circunstancias.
Imagen: DW/Eline van Nes
Buscar una salida
El centro de recepción recientemente inaugurado en Maicao, en la región de La Guajira, una colaboración entre ACNUR y las autoridades colombianas, es el primero de su tipo en Colombia. Las agencias gubernamentales locales y nacionales solicitaron ayuda a ACNUR debido al constante flujo de migrantes y refugiados venezolanos que cruzan la frontera hacia Maicao.
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Sin un propósito y con la salud amenazada
Domingo Fernández, un experiodista y profesor de 72 años, solía escuchar sobre los refugiados y verlos en las noticias, pero nunca pensó que terminaría en un refugio también. Habiendo trabajado la mayor parte de su vida, ahora se siente inútil. Cada mañana se levanta, espera su desayuno y riega el área cerca de la entrada de su tienda de campaña porque el polvo está afectando sus pulmones y ojos.
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Esperando una vida mejor
Rusmari Luna trajo un brazalete de Venezuela que su madre le hizo para el viaje. Tuvo que irse con sus hijos porque ya no podía mantenerlos. Ella cuenta que algunas personas en Venezuela entregan sus hijos a otras familias, otras los abandonan en las calles. También dice que encontraba esas historias difíciles de creer, pero ahora entiende lo desesperadas que están algunas de esas personas.
Imagen: DW/Eline van Nes
Soñar con casa
Rosmery Castillo dejó Venezuela hace un mes con dos de sus hijos y dejó un tercero con su hermano. Era enfermera en Valencia, pero la alta inflación desaparecía su salario mínimo y la dejaba sin casi nada para comprar comida. Ella planea regresar a Venezuela tan pronto como la situación mejore para estar con su madre y su abuela, a quienes tuvo que dejar atrás.
Imagen: DW/Eline van Nes
Compartir el techo y la voluntad de sobrevivir
Rosmery Castillo (34, izquierda) y Vanesa Añez (19) no se conocían cuando ambas llegaron al centro de recepción de ACNUR al mismo tiempo. Ahora comparten una carpa.
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Una mano amiga
Una clínica de la Cruz Roja Colombiana en el centro de recepción atiende los problemas de salud que pueden sufrir los migrantes y refugiados, como los problemas pulmonares causados por el polvo del desierto de La Guajira.
Imagen: DW/Eline van Nes
Solidaridad y entendimiento
La xenofobia siempre está acechando en el fondo, pero La Guajira tiene una conexión histórica con la ciudad venezolana de Maracaibo. Muchas personas de La Guajira se mudaron a Venezuela durante el conflicto colombiano de las FARC. Hay solidaridad entre personas de ambos lados. También hay muchos desplazados internos en Colombia, que entienden cómo es para los venezolanos estar en esta situación.
Imagen: DW/Eline van Nes
Tomar la ruta legal
El cruce oficial entre Colombia y Venezuela está marcado por algunas vallas y soldados haciendo guardia. Hay una forma oficial de cruzar entre Colombia y Venezuela, pero también unos 150 atajos ilegales, muchos de los cuales terminan justo en frente del cruce oficial.