La tecnología del ARNm ha revolucionado la medicina en pocos años. Durante la pandemia del coronavirus, se desarrollaron en pocos meses vacunas muy eficaces contra el patógeno SARS-CoV-2 gracias a esta tecnología.

E incluso si el virus desarrolla nuevas mutaciones agresivas, la tecnología del ARNm podría utilizarse para desarrollar vacunas más personalizadas en un breve espacio de tiempo. Y la tecnología, recientemente galardonada con el Premio Nobel de Medicina, puede hacer mucho más.

¿Vacunas contra el cáncer?

La tecnología del ARNm también ha dado un nuevo impulso a la investigación del cáncer. El director general (CEO) de la empresa biotecnológica Curevac, Alexander Zehnder, quiere sacar al mercado una vacuna contra el cáncer basada en el ARNm en un plazo máximo de cinco años.

Si se desarrollara una vacuna contra ciertos tipos de cáncer, sería un sueño hecho realidad para la humanidad. "Hace 20 años que se investiga en vacunas contra el cáncer. Pero los avances actuales son enormes", afirma Zehnder. "Hemos adquirido mucha experiencia durante la pandemia y la inteligencia artificial es ahora tan buena que resuelve muchos de los problemas que plantea la programación del ARNm", explica el jefe de Curavac en una entrevista con el diario alemán Bild.

Las vacunas contra el cáncer estimulan el sistema inmunitario para que las defensas del propio organismo combatan las células tumorales de forma selectiva. "Lo mortal del cáncer es que sigue creciendo. La vacuna contra el cáncer pretende detener el crecimiento, incluso si el cáncer ya ha hecho metástasis. El cáncer se convertiría entonces en una enfermedad crónica con la que se puede seguir viviendo durante décadas. El cáncer dejará de ser una sentencia de muerte", predice Zehnder.

Carrera por el desarrollo de vacunas

Además de Curevac, otras empresas están investigando intensamente una vacuna contra el cáncer. A principios de octubre de 2023, por ejemplo, la empresa de biotecnología BioNTech publicó resultados provisionales muy prometedores de un ensayo clínico en curso. En este ensayo clínico ya se está probando la eficacia de la vacuna contra el cáncer CARVac de ARNm de BioNTech en sujetos de prueba.

El director general de BioNTech, Ugur Şahin, se mostró muy optimista al anunciar que espera que en los próximos años haya vacunas contra el cáncer. "Creemos que será posible a gran escala para los pacientes antes de 2030", declaró Şahin en una entrevista con "Der Spiegel".

A largo plazo, las vacunas contra el cáncer deberían sustituir a las terapias convencionales. Esto también sería una bendición increíble, ya que la radioterapia y la quimioterapia son a menudo extremadamente estresantes para los pacientes de cáncer.

"La quimioterapia o la radioterapia nunca atacan solo al tumor, sino también al tejido sano. Por eso tienen tantos efectos secundarios", explica Zehnder. "La ventaja de usar ARNm es que el propio sistema inmunitario se estimula y combate sólo el cáncer y nada más".

Las células T ayudan al organismo a combatir las infecciones destruyendo las células enfermas o estimulando el ataque de otras células inmunitarias. Hasta ahora, las células T modificadas utilizadas en la inmunoterapia contra el cáncer sólo han podido combatir los cánceres de la sangre. Sin embargo, los rápidos avances en la tecnología del ARNm permiten albergar esperanzas de que en el futuro sea posible aplicar terapias eficaces y más suaves contra otros tipos de cáncer, además de la leucemia. Entre los enfoques más prometedores se encuentran las vacunas contra el cáncer de piel (melanoma), pulmón, mama y páncreas.

(gg/ers)