Lilly, una chica de 12 años, mira con fascinación a su compañera de clases, sigue con concentración el lento movimiento de sus brazos, y los imita con los suyos. Las dos estudiantes están paradas frente a frente y se mueven casi al unísono. El actor irlandés Marcus Bale atraviesa el aula y mira a los 26 alumnos. "Hagan movimientos pausados”, les aconseja.

Marcus Bale y su colega, el actor Edward McCarthy, vienen por una semana a Wiesbaden, expresamente a la escuela Helene-Lange, pues acá los estudiantes del octavo grado aprenden teatro, y de hecho lo hacen en inglés. En lugar de asistir a las habituales clases de Matemáticas, Alemán o Biología, practican ejercicios de concentración con profesionales internacionales.

Abrir la mirada

Muchos estudiantes ya han podido acumular experiencia en pequeñas y grandes agrupaciones. Ellos saben que continuarán haciendo teatro después de esta semana. En el noveno grado todos los estudiantes hacen obras teatrales o proyectos cinematográficos, respectivamente.

El teatro se escribe con mayúsculas en la escuela Helene-Lange. Ha sido así desde hace 25 años. En esa época comenzaron por casualidad y en pequeña escala, cuenta el profesor Arnulf Kunze. „Un curso quería representar una obra como parte de un proyecto escolar, y uno de los estudiantes comentó que su tío era actor y formaba parte del Staatstheater in Wiesbaden; él podría mirar alguno de los ensayos. El tío no tenía tiempo, pero un colega suyo sí. Entonces el actor les dio a los estudiantes algunas recomendaciones y despertó su fascinación por hacer teatro. Esa fue la chispa inicial", recuerda Kunze.

Desde entonces el teatro es parte permanente del concepto de aprendizaje de esta Reformschule. “Fomentamos la `desescolarización` de la escuela desde diversos sectores”, señala el director Eric Woitalla. “Procuramos en alta medida que el aprendizaje sea lo menos ´escolar´ posible”.

Por ello los estudiantes realizan prácticas vinculadas al teatro en otras asignaturas. Por ejemplo un taller en Religión acerca del tema “Juventud y vejez”, así como una práctica de mediciones en Matemáticas.

Autogestión

Aproximadamente 620 niños y adolescentes asisten a la escuela Helene-Lange en Wiesbaden, la capital del estado de Hesse, ubicada a 30 kilómetros de Fráncfort del Meno. La modalidad de escuela integral abarca del quinto al décimo grado. Los estudiantes y profesores financian el teatro, en especial los costosos talleres con actores y directores profesionales, de manera peculiar: limpiando. La escuela tiene un acuerdo con el ayuntamiento. Los estudiantes y maestros se ocupan de la limpieza de la mayor parte de la escuela y a cambio reciben dinero del Estado para cubrir los costos de su programa teatral.