El presidente de Francia, François Hollande, abandonó el Consejo Europeo en Bruselas para volver a París y convocar en el Elíseo una reunión del Consejo Restringido de la Defensa.

"No hay duda de que se trata de un ataque terrorista", dijo Hollande sobre el ataque a una fábrica en Isere (sureste de Francia), donde ha sido decapitada una persona. El presidente francés confirmó igualmente que el sospechoso ha sido detenido e identificado y que se han tomado las medidas necesarias para evitar nuevas acciones en la zona.

"La intención del hombre era provocar una explosión y no hay duda que se trata de un ataque de naturaleza terrorista, dado que además ha sido encontrado un cadáver decapitado con inscripciones", explicó Hollande en conferencia de prensa antes de trasladarse a París. Apuntó que lo que se conoce hasta el momento es que "hay un
muerto y dos heridos".

Ataque a fábrica en Isere

Según se supo, este viernes (26.6.2015) un hombre murió y varias personas resultaron heridas en un ataque a una fábrica en la localidad de Saint-Quentin-Fallavier, en el departamento de Isère, cerca de Grenoble, en el este de Francia.

De acuerdo con testigos, un hombre entró esta mañana a la fábrica portando una bandera islámica. Según la web del diario local "Le Dauphiné", un vehículo entró dentro de la empresa Air Products y colisionó contra varias bombonas de gas dentro de la fábrica, lo que originó una explosión. En un portal de las instalaciones se halló la cabeza de un hombre decapitado que tenía inscripciones en árabe.

La sección antiterrorista de la Fiscalía de París anunció que ha abierto una investigación por "asesinato y tentativas de asesinato en banda organizada y en relación con un acto terrorista" por el atentado perpetrado este viernes contra la fábrica en Isère. También investiga los cargos de "destrucción y degradación a través de una sustancia explosiva en banda organizada y en relación con un acto terrorista" y de "asociación terrorista para cometer atentados contra las personas".

De acuerdo con el experto Sajjan Gohel, director de Seguridad Internacional de la Fundación Asia-Pacífico, entrevistado por CNN, el hecho de que el presunto atentado se haya realizado en una localidad alejada de París es preocupante porque podría representar la intención de grupos o células islamistas de propagar el terror en el país sin temer las estructuras de vigilancia acostumbradas en las capitales europeas.

Sin embargo, el presidente Hollande y otro miembros de la clase política francesa advirtieron que no había que sacar conclusiones apresuradas y pidió a la población que no contribuyera a crear una atmósfera hostil contra los musulmanes en Francia y en Europa.

CP (ap, rtr, efe)