La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, fue ingresada la tarde del domingo (30.12.2012) en un hospital debido a las complicaciones sufridas tras golpearse la cabeza. "Ella está en tratamiento con anticoagulantes y se encuentra en el NewYork-Presbyterian Hospital para que los médicos puedan monitorear la medicación en las próximas 48 horas. Serán ellos quienes decidan las acciones a seguir", dijo Philippe Reines, portavoz de la autoridad.

Según Reines, en los estudios que se realizaron a Clinton se detectó un coágulo, aunque no especificó en qué zona del cuerpo. La secretaria de Estado deberá permanecer bajo observación. "En el curso de un examen de seguimiento, los médicos hallaron que se había formado un coágulo de sangre, producto de la contusión cerebral que sufrió hace varias semanas", dijo Reines.

La secretaria de Estado, de 65 años, se desmayó el 15 de diciembre a raíz de un virus intestinal que le provocó deshidratación y, según informaciones oficiales, sufrió una conmoción cerebral. Entonces Clinton debió cancelar un viaje al extranjero. Desde esa fecha se ha restado importancia a la situación, apelando siempre a que la secretaria de Estado se estaba recuperando.

Sin embargo, el 20 de diciembre Clinton también debió cancelar una comparecencia que debía dar ante el Congreso, sobre un informe del ataque contra la embajada de Estados Unidos en Bengasi, Libia, hecho ocurrido en septiembre y donde murieron cuatro estadounidenses, incluido el embajador. En todo caso, ella ha dicho que declarará antes de fines de enero.

Clinton ya había confirmado que no seguirá en su cargo cuando el presidente Barack Obama renueve su mandato, lo que levantó fuertes rumores sobre el verdadero estado de salud de la esposa del ex presidente Bill Clinton. Debido a ello, el presidente Obama propuso la semana pasada a John Kerry para reemplazar a su actual encargada de relaciones exteriores.

Tiene antecedentes

La ex senadora ya había sufrido en 1998 una trombosis, según narró ella misma a New York Daily News. Clinton calificó ese episodio como “el mayor susto” que ha vivido. "Estaba en campaña por (el senador por Nueva York) Chuck Schumer, cuando me empezó a doler el pie y tenía dificultades para ponerme el zapato", relató. Esa vez sanó por completo. “Pudimos disolverlo por completo y no hubo más consecuencias", dijo Clinton, según la agencia Reuters.

Las encuestas dicen que la secretaria de Estado, quien perdió por estrecho margen la nominación como candidata presidencial demócrata en 2008, es la más popular del gabinete y a menudo es mencionada como opción para las elecciones de 2016.

Autor: Agencias
Editor: Diego Zúñiga