Hungría y Eslovaquia siguen negándose a recibir refugiados
6 de septiembre de 2017
Eslovaquia y Hungría no pueden rechazar la reubicación de solicitantes de asilo desde Grecia e Italia, según dictaminó hoy el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Ambos países rechazan el fallo.
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Los Gobiernos de Polonia y Hungría seguirán negándose a recibir refugiados pese a la decisión de este miércoles (06.09.2017) del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, el TJUE, de desestimar la impugnación del sistema de reubicación por cuotas de la Unión Europea . Hungría y Eslovaquia, con el apoyo de Polonia, cuestionaron ante el TJUE este esquema adoptado en septiembre de 2015 por la mayoría de los países de la UE para distribuir a 120.000 personas llegadas a Italia y Grecia entre el resto de países del bloque.
De esta manera se buscaba reducir entonces la presión sobre los países mediterráneos, a los que los refugiados habían llegado ese año en grandes cantidades, muchos de ellos huyendo de la guerra de Siria. Según el sistema de reubicación, Hungría está obligada a aceptar a 1.294 refugiados, pero no ha abierto sus puertas a ninguno, mientras que Eslovaquia debería recibir a 902 y acogió a 16.
"Este veredicto es indignante e irresponsable", dijo el ministro de Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, en Budapest. "Es una resolución política que viola la ley europea y los valores europeos". "Este fallo coloca a la Comisión Europea por encima de las naciones y eso es inaceptable", añadió en conferencia de prensa, donde prometió que "la verdadera batalla acaba de comenzar". Según el ministro húngaro, la decisión socava la seguridad y el futuro de toda Europa. Szijjarto prometió que Hungría seguirá sin recibir a refugiados bajo el sistema de cuotas.
"Mejor perder los fondos que aceptar refugiados"
"Esto no modifica en absoluto la opinión del Gobierno polaco en lo que se refiere a política migratoria", dijo por su parte la primera ministra polaca, Beata Szydlo, que aseguró que esperaba esa decisión. Hasta ahora las autoridades polacas se han negado a cumplir su aporte y recibir refugiados alegando "razones de seguridad". El anterior Gobierno polaco había aceptado el sistema de cuotas.
Eslovaquia, en tanto, aceptó este miércoles (06.09.2017) el veredicto del TJUE, aunque criticó la decisión y la calificó de "injusta". "Los refugiados no quieren venir a Eslovaquia. ¿Debemos construir un muro para que se queden con nosotros?", se preguntó el primer ministro eslovaco, el socialdemócrata Robert Fico. El mandatario considera que tiene más sentido la oferta de su Gobierno de mostrar solidaridad contribuyendo a la protección de las fronteras de la UE.
Por su parte, el presidente de la República Checa, Milos Zeman, afirmó que preferiría que su país perdiera fondos de la Unión Europea antes que tener que recibir a refugiados. "No debemos dejarnos amenazar. Si las cosas se ponen feas, es siempre mejor renunciar a las dotaciones europeas que dejar entrar a inmigrantes", aseguró hoy jefe del Estado checo.
MS (dpa/efe)
El destino de los refugiados: huir hacia una vida incierta
Las imágenes de las grandes masas de refugiados de camino hacia Europa en 2015 y 2016 dieron la vuelta al mundo. Nunca se había documentado de forma tan amplia el sufrimiento que implica el proceso de la huida.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Messinis
El objetivo principal: sobrevivir
Un viaje vinculado a las penurias y a los peligros para el cuerpo y el alma: huyendo de la guerra y la miseria, más de un millón de personas, sobre todo de Siria, se pusieron en camino en 2015 y 2016 hacia Turquía y Grecia. En las islas de Lesbos, Quíos y Samos todavía aguantan más de 10.000 personas en los campamentos. Desde enero hasta mayo de 2017, llegaron más de 6.000 nuevos refugiados.
Imagen: Getty Images/AFP/A. Messinis
A pie hacia Europa
Millones de personas intentaron llegar en 2015 y 2016 a Europa Occidental desde Grecia o Turquía siguiendo a pie la ruta de los Balcanes a través de Macedonia, Serbia y Hungría. Las masas de gente disminuyeron cuando se canceló oficialmente esta ruta y muchos países cerraron sus fronteras. Hoy, la mayoría de los refugiados llega a través de otra ruta muy peligrosa, de Libia a Europa por mar.
Imagen: Getty Images/J. Mitchell
Conmoción mundial
La imagen del niño de tres años, Aylan Kurdi, muerto en una playa turca dio la vuelta al mundo, causando una gran conmoción. Las imágenes de dicha tragedia se hicieron virales y se convierton en el símbolo de la crisis de los refugiados sirios. Europa no debe mirar hacia otro lado, era el mensaje que aparecía en las redes sociales.
Imagen: picture-alliance/AP Photo/DHA
Caos y desesperación
Avalancha en el último minuto. Muchos sabían que su única vía de escape a través de Europa ya no estaba abierta, así que miles de personas intentaron desesperadas tomar trenes y buses abarrotados en Croacia. Unos días más tarde, Hungría también cerró sus fronteras. Al mismo tiempo, adecuaron contenedores, para que los refugiados pudieran quedarse hasta que llevasen a cabo su proceso de asilo.
Imagen: Getty Images/J. J. Mitchell
Ataques contra los refugiados
La irritación de la opinión pública fue enorme cuando una camarógrafa húngara puso una zancadilla a un hombre con su hijo en brazos, que intentaba cruzar un bloqueo principal en Röszke, Hungría, cerca de la frontera. En uno de los momentos más críticos de la crisis de los refugiados, en Alemania también aumentaron los altercados y ataques contra los refugiados.
Imagen: Reuters/M. Djurica
Fronteras cerradas
Cuando se cerró la ruta de los Balcanes en marzo de 2016, se produjeron muchos tumultos en las zonas froterizas. Miles de refugiados se quedaron atascados y la policía reaccionó de forma ruda. Muchos intentaron, como estos refugiados cerca de la frontera entre Grecia y Macedonia, evitar las fronteras, que se habían cerrado hacía poco tiempo.
Un niño bañado en polvo y sangre. La foto de Omran en Alepo, de cinco años de edad, dejó a la opinión pública en estado de shock y se convirtió en el símbolo de la crueldad de la guerra civil siria y la miseria del pueblo sirio. Un año más tarde, la red mostró nuevas fotos del menor en buen estado de salud. Los seguidores de Al Assad criticaron entonces que la imagen se usó como propaganda.
Imagen: picture-alliance/dpa/Aleppo Media Center
Incertidumbre en la nueva patria
Un hombre sirio carga a su hija, bajo la lluvia, en la frontera griego-macedonia, cerca de Idomeni. Espera encontrar seguridad para su familia en Europa. Según el Reglamento de Dublín, las solicitudes de asilo se deben procesar en el país de llegada de la UE. Muchos tuvieron que regresar al país de llegada. Grecia e Italia están sobre todo superados por la cantidad de solicitudes de asilo.
Imagen: Reuters/Y. Behrakis
Esperando el apoyo de Alemania
Alemania es el país de destino número uno de los refugiados, aunque su política de refugiados y de asilo se haya vuelto más restrictiva debido al gran flujo de inmigrantes. En Europa, ningún país ha acogido a tantos refugiados como Alemania: 1,2 millones. La canciller Angela Merkel se convirtió en un ícono para muchos de ellos.
Imagen: picture-alliance/dpa/S. Hoppe
Estado de emergencia en los campamentos de acogida
El campamento de acogida de refugiados en el norte de Francia, en Calais, fue desalojado. El lugar se incendió y las cerca de 6.500 personas tuvieron que ser evacuadas y ubicadas en otros centros. Medio año más tarde, los informes de organizaciones humanitarias aseguran que muchos menores siguen merodeando y viviendo en los alrededores de Calais.
Imagen: picture-alliance/dpa/E. Laurent
Ahogados en el Mar Mediterráneo
Las embarcaciones de salvamento marítimo civiles y estatales no paran. A pesar del peligro extremo que pueden correr sus vidas, muchos refugiados huyen de la pobreza o de la guerra en sus países con la esperanza de tener un futuro mejor en Europa. Solo en 2017, 1.800 personas han perecido en el viaje. En 2016, 5.000.
Imagen: picture alliance/AP Photo/E. Morenatti
Sin ley en Libia
Cientos de miles de refugiados del África subsahariana y de Oriente Próximo esperan en los campamentos de Libia para poder cruzar a Europa por mar. La situación en dichos campamentos es catastrófica, advierten las organizaciones humanitarias. Hay testigos que hablan de esclavitud y prostitución forzada. Y a pesar de todo, no dejan de soñar con Europa.
Imagen: Narciso Contreras, courtesy by Fondation Carmignac