Los números confirman que es el evento de electrónica de consumo y entretenimiento más grande el mundo: 1.500 expositores y un crecimiento del 2% en cuanto a la superficie de exposición, 240.000 visitantes de todo el mundo y 6.000 periodistas encargados de informar sobre esta feria única en su género.

Christian Göke, director de la Feria de Berlín, manifestaba antes de la apertura: “Nos hemos convertido en el numero uno”. En ningún otro evento del mundo hay tantas presentaciones como en la IFA, convertida para el visitante especializado en destino por excelencia. “Aquí se encuentra todo lo que luego aportará dividendos en la venta directa al consumidor”,afirmó Göke.

El ocaso de un clásico

La dirección de la feria calcula que el volumen de negocio de la IFA alcanzará los 3.800 millones de euros, debido en parte a la preparación de la campaña de navidad, con un pronóstico total para todo el ramo de 28.100 millones. Hasta esa cifra todavía hay sin embargo un largo trecho. Sobre todo según indican las cifras del primer semestre de 2013, con una con una reducción del mercado del entretenimiento y la comunicación de un 3%.

Aunque smartphones, tabletas y demás electrodomésticos sigan vendiéndose, la clásica industria de la electrónica de entretenimiento sufrió una significativa caída del 20%, aclara Hans-Joachim Kamp, presidente del Consejo de la Sociedad para la Electrónica de Comunicación y Entretenimiento (GFU): “Esta disminución fue más grave de lo que se esperaba”. Sobre todo en cuanto a la venta de televisores, ya que muchos alemanes compraron nuevos dispositivos en 2012 debido a la Eurocopa y el cierre de la señal analógica. “No hubo nada este año y se ha perdido un 25% de facturación”, precisa Kamp.

Consumidor ignorante vs. aparatos inteligentes

En cuanto a las nuevas generaciones de televisión, después de haberse presentado en su momento como éxito de ventas del futuro, las pantallas 3D tampoco cumplieron las expectativas. “Nadie permanece sentado con unas gafas durante tres o cuatro horas delante del televisor”, aclara Kamp. Pero actualmente, una nueva opción acapara todas las esperanzas del mercado: la conexión entre Internet y televisión, también llamada Smart-TV. 5 millones de hogares alemanes ya han optado por este modelo y se calcula que sean 7 final de año. Sin duda, uno de los temas principales de la feria, donde también se inició una campaña mediática para presentar la pantalla plana como central de entretenimiento y comunicación en el hogar.

Ante todas estas novedades, lo que queda claro es que el consumidor necesita información. En una encuesta de la Asociación alemana de la Economía de la Información, Telecomunicación y Nuevos Medios, Bitkom, los resultados mostraron que muchos alemanes están desbordados con la Smart-TV. ”La cuarta parte de los encuestados no sabía nada. Y eso siempre es malo”, aclara Kam: “Además, una cosa es tener una Smart-TV y otra conectarla a Internet. Y eso sólo lo hace el 58%”.

¿Lavadoras con Wi-Fi?

La conexión entre electrodomésticos en el hogar, también llamada Internet de las cosas, es otro de los puntos fuertes de la IFA. Sobre todo para electrodomésticos del día a día con lavadoras, neveras, cafeteras y otros aparatos conectados en red.

Pero también fuera del hogar aparecen cada vez más utilidades para Internet. Alan Mulally, presidente de Ford, presenta por primera vez su nuevo concepto de vehículo en la IFA en lugar de la IAA (Feria Internacional del Automóvil). La razón está clara para Göke: “Él está convencido de que en el futuro, la conexión y los autos inteligentes serán los mejores argumentos de venta”.

En este maravilloso mundo interconectado, todas las señales apuntan a que el consumidor asimilará la evolución de la técnica y los cambios en el día a día. Sin embargo, que dicha evolución solo traiga ventajas sería cuestionable, observando los recientes casos de espionaje y robo de datos en Internet. En la feria, mejor darle la espalda a esta cara de la moneda a la hora de presentar este nuevo e inteligente mundo en red.