¿El Gobierno alemán agudiza la catástrofe de los refugiados en Yemen? Los reprensentantes de la Iglesia Católica en Alemania están convencidos: "La guerra en Yemen se lleva también a cabo con armas alemanas”, criticó el presidente de la Conferencia Conjunta Iglesia y Desarrollo (GKKE), Martin Dutzmann, en el informe número 21 de la Iglesia sobre la exportación de armamento a Arabia Saudí. En la guerra civil de Yemen luchan, desde 2015, los rebeldes hutíes, pertenecientes al chiísmo, y los sunitas del Gobierno yemení, apoyado por Arabia Saudí. Según las organizaciones humanitarias, casi 20 millones de yemeníes, el 75% de la población, depende de la ayuda humanitaria.

Dutzmann afirmó que desde enero de 2014 a abril de 2017, Arabia Saudí compró lanchas patrulleras y piezas de montaje por valor de mil millones de euros a Alemania, que han sido usadas, por ejemplo, para obstaculizar los envíos de ayuda humanitaria a los puertos de Yemen. "La exportación alemana de armas contribuye así a la catástrofe de refugiados”, explicó.

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Exportación de armas: ¿sin control?

La GKKE apela al Gobierno alemán a finalizar ya la exportación armamentística en la región. El representante de la Iglesia Católica Karl Juesten, expresó que sobre todo a Arabia Saudí no se le debe vender armamento alemán, pero tampoco a Egipto, Qatar, los Emiratos Árabes, Argelia y Turquía.

En el informe de control armamentístico se refleja que más del 90% del armamento se ha exportado a países no pertenecientes a la UE y a la OTAN. Más de la mitad de las nuevas licencias de exportación se concedió a terceros países.

En total, las exportaciones alcanzaron el valor de 7,900 millones de euros en 2015 y 6.800 millones de euros en 2016: las cifras más altas de los últimos 20 años. "La exportación a terceros países no es entretanto una excepción sino que se ha convertido en un hecho regular”, criticó Dutzmann. Esto contradice, según los representantes eclesiásticos, las directrices de una política de paz del Gobierno alemán, que se volvieron más estrictas en mayo de 2017.

Más control en la UE

La GKKE cree que el próximo Gobierno alemán tiene la obligación de crear una ley de exportación de control de armamento, que realmente cumpla con su cometido. En cada licencia de exportación se deberían especificar las razones. Si el gobierno alemán lo hiciera así, entonces se posicionaría de otra manera que Estados Unidos, que tras la visita de Donald Trump a Arabia Saudí vendió más de 110 mil millones de dólares en armas al país, sin tener en cuenta la situación de los derechos humanos allí. Juesten exige que "haya al fin una buena gestión gubernamental de este tema de ámbito político tan sensible y propenso a la corrupción”.

Los representantes eclesiásticos temen que la política de defensa y seguridad europea sea peligrosa para el control restrictivo y transparente de armas. La estrecha colaboración de los 25 miembros de la UE en torno a la producción armamentística podría dificultar los controles de exportación de armas, porque "a dichas empresas se les puede permitir infringirlos”. En particular, Alemania y Francia han anunciado proyectos comunes con nuevos aviones de combate, tanques y artillería. Antes de ponerlos en marcha, ambos países deben comunicar en una "lista blanca”, quiénes comprarían estos sistemas de armamento.

Los representantes eclesiásticos exigen, como el Parlamento Europeo en septiembre de 2017, la creación de un gremio de control armamentístico dentro de la UE con amplias atribuciones. Agniezska Brugger, experta en defensa de Los Verdes, piensa que este informe debe servir de toque de atención a los partidos inmersos en las negociaciones para la formación del nuevo gobierno alemán: "La negligencia del control de exportación de armamento y desarme por parte de la Unión y el SPD no puede continuar en sus próximas negociaciones”.

Richard Fuchs (RMR/ERS)