Unos 200 bomberos trabajan en la extinción de un incendio forestal declarado ayer cerca de Berlín, que pese a estar en principio controlado, sigue provocando cortes en varias carreteras
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Los bomberos, con ayuda de medios aéreos, han logrado detener el avance de las llamas que se acercaban a Fichtenwalde y descartan ya la evacuación de esta localidad de unos 3.000 habitantes, a los que la policía pidió ayer que se preparasen para la eventualidad.
Sin embargo, las autopistas A9 (Múnich-Berlín) y A10 (circunvalación a Berlín) siguen parcialmente cortadas al tráfico por los problemas de visibilidad derivados de la intensa humareda provocada por el fuego, lo que está generando importantes atascos desde ayer.
Las tareas de extinción se han visto dificultadas porque en el subsuelo de la zona afectada por las llamas hay enterradas municiones de la II Guerra Mundial.
Al menos un helicóptero de la Policía de Brandeburgo y otro de la Bundeswehr (ejército) están colaborando en la extinción del incendio, junto a unas tanquetas con depósito de agua de los Bomberos de Brandeburgo.
Gran parte del este de Alemania y la región de Fráncfort se encuentran en zona de máxima alerta por riesgo de incendios debido a las altas temperaturas de los últimos días, que siguen a semanas sin precipitaciones apreciables en el verano más cálido del país desde 2003. (efe)
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Ola de calor: Alemania se achicharra
¿Idilio veraniego? Nada de eso. Los prados se secan, el asfalto se agrieta, hay incendios en los campos. La gente y los animales, incluyendo un oso polar, buscan la forma de refrescarse.
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Pleul
Calor extremo
Solo dos grados faltan para llegar a la marca de los 40. El Servicio Meteorológico pronostica para los próximos días temperaturas de hasta 38 grados. El calor tiene atenazada a Alemania.
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Pleul
Descanso en el parque
¡Simplemente, no hacer nada! Una ciclista toma sol en un parque de Berlín. Con estas temperaturas, lo mejor es relajarse y disfrutar al aire libre, en lugar de cocinarse entre las propias cuatro paredes.
Imagen: picture-alliance/dpa/W. Kumm
Problemas para despegar
En plena temporada de vacaciones, el aeropuerto de Hanóver tuvo que ser cerrado de forma imprevista. La razón: daños en las pistas, provocados por el calor. Debido a las grietas en el asfalto hubo que cancelar 85 despegues y aterrizajes.
Imagen: picture-alliance/dpa/Flughafen Hannover
El agua escasea...
...en este campo en las afueras de la localidad de Garding, en Schleswig-Holstein. La ola de calor tiene consecuencias negativas para las cosechas y los animales. El presidente de la asociación de agricultores, Joachim Rukwied, demandó que se declarara estado de emergencia en las regiones más afectadas.
Imagen: picture-alliance/dpa/A. Heimken
Bomberos en acción
Las espigas secas bajo el sol abrasador pueden ser fácilmente pasto de las llamas. En este campo de Brieslag, en Brandeburgo, tuvieron que entrar en acción los bomberos para apagar un incendio.
Imagen: picture-alliance/dpa/J. Stähle
Agua de la piscina
Cuando el agua escasea, hay que improvisar. En la localidad de Serno, en Sajonia-Anhalt, un carro de bomberos llena su estanque con el agua de la piscina municipal. Cerca de 60 hectáreas de sembradíos y bosques se quemaron en la zona de Wittenberg.
Imagen: picture-alliance/dpa/J. Woitas
Una brisa, ¡por favor!
En la playa de Timmendorf, en Schleswig-Holstein, ya no cabe un alfiler. Y eso que, en comparación con el resto del país, las temperaturas registradas allí son más bien frescas: el martes, el termómetro marcó 28 grados.
Imagen: picture-alliance/dpa/M. Scholz
Helado en vez de hielo
Tonja, la osa polar del zoológico berlinés de Friedrichsfelde, intenta escapar del calor con un buen baño, y con una deliciosa copa de helados con frutas.
Imagen: Imago/Olaf Wagner
Una mirada al futuro
Lo que ahora se considera un verano excepcionalmente caluroso, podría convertirse en algo normal dentro de unos 30 años. El Instituto de Investigación de Consecuencias Climáticas de Potsdam predice que las fases de calor extremo se volverán más frecuentes.