Aunque se pudieron controlar la mayoría de los focos de los incendios en la región que circunda a Atenas, los bomberos siguen luchando contra las llamas en otros lugares, como en esta imagen, en Vlyhada, en una plantación de olivos. Numerosas casas han sido destruidas por los incendios forestales en varias partes del país en los últimos días.

Un habitante de la ciudad de Dervenochoria lleva a sus caballos a un lugar seguro, lejos de las llamas. Muchas personas han tenido que abandonar sus casas por precaución en los últimos días. Un campamento vacacional con 1.200 niños fue evacuado cerca de Atenas. Varias ciudades alrededor de la capital griega están afectadas por los incendios, así como la popular isla de Rodas.

Gran cantidad de curiosos se acercan a la ciudad de Mandra para observar a los pilotos de un total de ocho helicópteros durante sus arduas labores de extinción de incendios. Aunque la situación actualmente parece estar bajo control, los fuertes vientos y una nueva ola de calor podrían reiniciar los fuegos.

Varias casas han sido destruidas por las llamas. Por suerte, no se reportaron muertos ni heridos. En el verano de 2021 hubo severos incendios que arrasaron parte del país. Tres personas perdieron la vida y más de 100.000 hectáreas de bosque fueron destruidas. En 2018, más de 100 personas murieron en el peor incendio del país hasta la fecha en Mati, cerca de Atenas.

Los bomberos caminan sobre el techo de una casa en Mandra. Los servicios de emergencia se quedarán, en principio, en el lugar, por si las llamas vuelven a reavivarse. El portavoz del departamento de bomberos, Vassilis Vathrakogiannis, afirmó que hay un riesgo muy alto de que esto suceda, sobre todo, en la región alrededor de Atenas, en Ática, en la isla de Creta y en la península del Peloponeso.

Anna Nikolaou, de 89 años, y Giorgos Nikolaou, de 86, sentados frente a su casa destruida en Kalyvia, cerca de Atenas. No saben si podrán seguir viviendo allí. La situación no va a mejorar. El meteorólogo griego Theodoros Giannaros, del Observatorio Nacional de Atenas, ha advertido que la situación está empeorando con el calor, la sequía y los incendios en el país.

El fuego abrasador sigue encendido dentro de un árbol, en Mandra. El próximo fin de semana (del 21 al 23 de julio de 2023) se esperan de nuevo hasta 44 grados. Junto a la esperada bajada de temperaturas del próximo lunes (24.7.2023) se le sumarán fuertes vientos, es decir, clima "caluroso, seco, ventoso". Cualquier chispa puede provocar un gran incendio, según el meteorólogo Theodoros Giannaros.