El conflicto de Ucrania y desafíos como el terrorismo, la lucha contra la radicalización y la ciberseguridad protagonizan una cumbre de la OSCE que reúne este jueves (07.12.2017) y mañana viernes en Viena a más de 40 ministros de Exteriores, entre ellos, el estadounidense Rex Tillerson y el ruso Serguéi Lavrov.

"Me alegro de que hayamos conseguido establecer medidas y actuar de forma activa y en común en la lucha contra el terrorismo y la radicalización", dijo hoy el presidente de turno de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), el austríaco Sebastian Kurz.

El ministro de Exteriores austríaco y anfitrión de la cumbre destacó en unas declaraciones poco antes del inicio que Viena es "un espacio para el diálogo", en referencia a la persistente tensión entre Rusia y Occidente.

Relaciones Rusia-Occidente en la mira

La OSCE, formada por 57 países de Europa, Asia Central y América del Norte, es el único organismo multilateral, aparte de Naciones Unidas, en el que Rusia y las democracias occidentales se reúnen bajo un mismo techo.

Las relaciones entre Rusia y Occidente atraviesan por uno de sus peores momentos desde el fin de la Guerra Fría, sobre todo por el papel de Moscú en la crisis de Ucrania y por la anexión de la península ucraniana de Crimea en 2014.

La cumbre en el antiguo palacio imperial del Hofburg servirá para abordar asuntos como la prevención de la radicalización y el terrorismo, debatir sobre la migración, los conflictos en la región de la OSCE, como Ucrania, Nagorno Karabaj (entre Armenia y Azerbaiyán), y tratar de impulsar la no proliferación de armas convencionales y el desarme. (efe)