El presidente del Bayern Múnich, Uli Hoeness, comenzará a ser juzgado este lunes 10 de marzo por presunta evasión fiscal en un proceso que podría enviarlo a la cárcel y que viene rodeado de una enorme expectativa mediática dentro y fuera de Alemania. El directivo de 62 años está acusado de haber evadido más de tres millones de euros con una cuenta en Suiza que ocultó durante años al fisco. El juicio en Múnich constará en principio de cuatro audiencias, por lo que la sentencia podría conocerse el jueves. La corte se prepara para una avalancha de medios y curiosos ya este lunes, cuando declaran tres de los cuatro testigos. "No puedo descartar que vengan 100 personas, pero también pueden ser 500 o 5.000", avisó el jefe de la corte, Christian Schmidt-Sommerfeld. Más de 450 periodistas solicitaron una acreditación para cubrir el juicio. Sólo la obtuvieron 49, porque los asientos disponibles en la sala son limitados. También se esperan seguidores y rivales del Bayern Múnich. Unos 150 policías intentarán evitar incidentes. Agencias