¿Recuerda cómo era el mundo antes de Internet? No había e-mails, ni descargas de MP3, ni YouTube, ni se podía acceder a las últimas noticias mediante un click. La red ha cambiado nuestro mundo, en forma radical. Y seguirá modificando nuestra sociedad: los próximos diez años serán por lo menos tan apasionantes como la última década.

Las posibilidades de Internet distan de haberse agotado. La última etapa hasta el momento la acometió Apple hace un par de años, dando inicio a una nueva revolución. Con el IPhone, la red se volvió móvil. Los que antes permanecían en casa o en la oficina frente a su PC, leyendo correos electrónicos o navegando en la red, pueden hacer ahora lo mismo en cualquier lugar. Una mirada a lo que hacen los competidores revela cuán revolucionario es –o, mejor dicho, fue- el IPhone: tanto Nokia como Motorola y otros fabricantes de celulares ofrecen hoy en día teléfonos portátiles que permiten navegar en Internet.

Datos siempre accesibles

La tendencia hacia una mayor movilidad se mantendrá también en los próximos años. No sólo los aparatos para navegar en Internet son móviles, sino también el acceso a los datos personales. “Claud Computing” se llama la tecnología, que existe ya desde hace un tiempo pero que probablemente se vuelva realmente un fenómeno masivo en los años venideros. Consiste en que los datos personales no están ya almacenados en el disco duro del propio PC, sino en Internet. Eso dificulta determinar el lugar de almacenamiento, pero, a cambio, sus datos lo acompañarán a todas partes y podrá acceder a ellos tanto en la oficina como en casa, con su laptop o su celular.

Internet estará omnipresente, disponible siempre y con suficiente velocidad. Ésa es la visión. No obstante, también es probable que aumenten los escépticos y críticos, ya que la red sabrá tanto de nosotros como nunca nadie había sabido jamás.

Críticas a Google y compañía

Ya en la actualidad se plantean por ejemplo críticas a Google y su forma de proceder. El consorcio es considerado un “pulpo” que recopila todo tipo de datos y los evalúa. Sobre todo tras los últimos escándalos sobre filtración de informaciones, mucha gente ha comprendido que no da lo mismo qué huellas se deja en Internet. Y tampoco es indiferente a quién le confía uno sus datos. Por eso, de seguro se observará con mayor atención lo que hacen las grandes empresas de Internet.

En lo que respecta a los PC, celulares y demases, los próximos años con certeza traerán también interesantes avances. Pero los acentos se desplazarán. Ya no vale la búsqueda permanente y exclusiva de lo más rápido y lo más barato.

La revolución del netbook

Los “netbooks”, computadores portátiles pequeños y económicos marcan hoy la pauta. Si antes se trataba de desarrollar PC con cada vez mayor capacidad y rapidez, ahora la gente se pregunta más bien: ¿qué necesito yo y cuánto estoy dispuesto a pagar? Por ejemplo, los netbooks bastan plenamente para procesar textos y enviar e-mails.

Lo que en cambio nunca será suficiente es la capacidad de almacenamiento. Música, películas, fotografías: cada vez más datos se almacenan en forma digital. Pero eso conlleva también un problema: cómo asegurar los datos. Cuando todos los recuerdos se encuentran en un disco duro, nadie se puede permitir una falla técnica.

Autor: Jörg Brunsmann/Emilia Rojas

Editor: Pablo Kummetz