Para este 9 de mayo se pronostican lluvias y nieve entremezcladas en Moscú. Pero, justo a la hora del desfile, las nubes desaparecerán y el sol brillará. ¿Cómo funciona un pedido de sol a domicilio?
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Este martes, Rusia celebra la victoria sobre la Alemania nazi. En los últimos años, siempre ha aparecido el sol, no importa que los meteorólogos hayan pronosticado lluvias durante el desfile. Se sabe que la fuerza aérea rusa ha llevado a cabo "vacunas de nubes” en el pasado. El objetivo es que las nubes se descarguen en lluvias pocos kilómetros afuera de la ciudad y se abra un hueco que deje pasar el sol sobre la ruta del desfile militar.
Para los meteorólogos, la "siembra de nubes” es objeto de controversia. Los estudios publicados estiman que la influencia es más bien baja. Pero los escasos resultados no se compadecen con los esfuerzos. La idea de que las lluvias se puedan llevar, sistemáticamente, a las regiones áridas en donde se necesitan las precipitaciones es una ilusión. Así como tampoco ha dado resultado impedir la caída de granizos demasiado grandes.
El yoduro de plata como núcleo de condensación
No importa si lo que se quiere es "hacer” buen tiempo o frenar la caída de granizo muy grande, el principio es el mismo: núcleos artificiales de cristalización son "inyectados” en la nube sobre la que se deposita el vapor.
Pero los militares rusos no son los únicos que usan sustancias químicas para "cultivar” nubes. Algunos viticultores alemanes también lanzan desde aviones pequeños gotas atomizadas de yoduro de plata, diluido en acetona, que supuestamente son tan pequeñas que no alcanzan el suelo.
Si estas sales se aplican debajo de la nube, éstas suben, gracias al efecto térmico. Lo ideal es que dichas sales se introduzcan directamente en las nubes que amenazan con tormenta.
Sobre los núcleos de yoduro de plata se precipita el vapor de agua, que se congela a las temperaturas más frías en la atmósfera superior. Los pequeños granos de hielo crecen rápidamente hasta formar aguanieve, granizo o fina lluvia.
¿Problemas ambientales?
Se presume que las sales de plata no causan mayor contaminación en el medio ambiente. Si bien el yoduro de plata es considerado una sustancia peligrosa en la UE, la dilución es tan fuerte que las moléculas en la lluvia son apenas detectables.
Si los militares rusos logran desterrar las lluvias este martes, solo se sabrá después del desfile. Porque cuando se trata de una pequeña área geográfica y un período específico de tiempo, el clima y las corrientes de aire son, a menudo, imprevisibles.
Fabian Schmidt (JOV/DZC)
¿Qué se puede hacer contra el cambio climático?
Un 75 por ciento de las emisiones globales surgen del uso de carbón, petróleo y gas. El otro 25 por ciento, de la agricultura y del desmonte. ¿Qué podemos hacer para evitar las emisiones? Aquí, diez propuestas.
Imagen: picture-alliance/dpa
1. Usar menos carbón, gas y petróleo
La mayoría de los gases invernadero vienen de las centrales energéticas, de la industria y del transporte. La calefacción de edificos causa un 6 por ciento de las emisiones globales. Quien usa energía eficiente y ahorra carbón, gas y petróleo, está protegiendo activamente el clima del planeta.
Imagen: picture-alliance/dpa
2. Producción propia de electricidad limpia
La electricidad ya no tiene que salir de las centales de carbón, petróleo y gas. Ya hay alternativas que hasta son más baratas. La electricidad se puede producir fácilmente, incluso en cantidades mayores a las necesarias. Por ejemplo, con celdas y módulos solares sobre los techos con una tecnología que hace tiempo está en el mercado.
Imagen: Mobisol
3. Cooperar con las buenas ideas
Cada vez más comunas, empresas y cooperativas invierten en energías renovables y venden electricidad limpia. Este parque solar pertenece a la compañía Saerbeck, un distrito alemán de 7.200 habitantes que produce más electricidad de lo que necesita y es un ejemplo. Aquí, una delegación de EE. UU. la visita.
Imagen: Gemeinde Saerbeck/Ulrich Gunka
4. No financiar a empresas que dañen el clima
Cada vez más ciudadanos, fondos de jubilaciones, seguros, universidades y ciudades retiran su dinero de empresas que trabajan con energías fósiles. Münster es la primera ciudad que se unió al "Divestment", un movimiento al que pertenecen 57 ciudades del mundo. Este movimiento global ganó tanta dinámica porque todos pueden participar.
Imagen: 350.org/Linda Choritz
5.Viajar en bicicleta, ómnibus y tren
Las bicicletas, el ómnibus y los ferrocarriles ahorran mucho C02. En comparación con el automóvil, un viaje en ómnibus es cinco veces más favorable al clima, y un viaje en tren hasta 15 veces más. Las ciudades que disponen de bicisendas y carriles especiales para los buses son las que más contribuyen con la protección del clima.
Imagen: DW/G. Rueter
6. No volar en avión si no es necesario
Volar es tremendamente dañino para el clima. Los hechos demuestran el dilema: para cumplir con los objetivos climáticos, actualmente cada habitante de la Tierra debería producir por año en promedio un máximo de 5,9 toneladas de CO2. Un vuelo de ida y vuelta entre Berlín y Nueva York produce por persona 6,5 toneladas.
Imagen: Getty Images/AFP/P. Huguen
7. Comer menos carne
Tambien la agricutlura es un problema. En el cultivo del arroz y en los estómagos de los vacunos y ovinos se genera el gas metano, muy perjudicial para el clima. La ganadería y el consumo de carne, que cada vez aumenta más, son puntos críticos debido a la enorme demanda de soja para alimentar a los animales. Para el cultivo de la soja se desmontan bosques y selvas enteras.
Imagen: Getty Images/J. Sullivan
8. Comprar alimentos biológicos
El gas hilarante daña el clima en gran medida. Su porcentaje en las emisiones globales está en un 6 por ciento. Se produce en centrales energéticas y por el uso de motores, pero sobre todo por el empleo de abonos artificiales en la agricultura industrializada. En la agricultura ecológica esos abonos están prohibidos, y eso ayuda a proteger el clima del planeta.
Imagen: imago/R. Lueger
9. Construir y consumir de manera sostenible
En la producción de cemento y hierro se produce mucho CO2. Por el contrario, el cultivo de madera y caña de bambú lo frena. La elección consciente de materiales de construcción contribuye con el clima, y lo mismo vale para el consumo. No es necesario seguir usando vasos plásticos que van a parar por millones a la basura todos los días.
Imagen: Oliver Ristau
10. Asumir nuestra responsabilidad por el clima
¿Cómo se puede evitar la emisión de gases invernadero para que las futuras generaciones puedan vivir sin catástrofes climáticas? Estos alumnos están fascinados por las energías limpias y la ven como una esperanza para un futuro en un planeta al que todos cuidemos. Cada uno de nosotros puede ayudar a que así sea.