El SÜDDEUTSCHE ZEITUNG, de Múnich, escribe: "Que el Consejo de Seguridad recurra ahora al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) como foro para resolver el conflicto no proporciona nuevas respuestas a la cuestión central de este conflicto. ¿Qué es más grande? ¿La peligrosidad objetiva de Irán o el temor de Occidente a Irán? ¿Cómo se puede conceder el derecho al enriquecimiento de uranio sin que se abuse de él para construir una bomba atómica? Occidente cree que ya se hallará una solución en tanto Teherán sienta la presión de sus adversarios. Pero es improbable que Irán desista de su programa atómico, sólo porque se halle en el orden del día en Nueva York. Simultáneamente aumenta el riesgo de que Teherán apueste por el enfrentamiento y que, como lo anunciara, proclame el "fin de la diplomacia".

Irán tiene un problema

EL NEUE ZÜRCHER ZEITUNG, de Ginebra, Suiza, opina: "Irán tiene un problema: que una serie de Estados, en su entorno más cercano o más lejano, no le tienen confianza. Se trata de un probkema político y por ello debe acometerse en el marco político de la ONU. Europa se esforzará por evitar la transformación del enfrentamiento en conflicto potencialmente militar. Occidente arriesga en este caso nuevamente presentarse como arrogante policía que quiere obstaculizar el desarrollo económico y la autodeterminación política de países del Sur pujantes. Pero con la inclusión del Consejo de Seguridad, Irán se ve expuesto a una mayor presión, que lo obliga a desvelar su accionar y sus intenciones. Teherán dice que aún hay espacio para negociar: ello debe tener validez también para negociaciones deben tener lugar en el marco de la ONU".

Alianza entre las mayores potencias

LA STAMPA, de Turín, escribe: "La declaración de Londres, que remite a Irán al Consejo de Seguridad, es el nacimiento de una alianza entre las mayores potencias del planeta, que temen los esfuerzos nucleares de un país en tiempos de la guerra contra el terrorismo. Casi 34 meses después de la caída de Saddam Hussein, las diferencias entre EEUU, la UE, Rusia y China en relación con la guerra de Irak han dejado, no obstante, espacio para prohibir a Estados como Irán, sospechosos de tener vínculos con el terrorismo, el acceso a armas nucleares".

Retórica iraní mucho más insegura

El ALLGEMEINE ZEITUNG, de Maguncia, escribe: "La llave para la solución del conflicto se halla en Moscú y Pekín. Ello ha quedado claro ayer. La aprobación inequívoca de Rusia y China a amenazar a Irán con el Consejo de Seguridad de la ONU afila la espada. La retórica de Teherán no ha sido todavía el inicio de una retirada, pero suena ya mucho más insegura que hace algunos días".

No pocos esfuerzos diplomáticos

El BRAUNSCHWEIGER ZEITUNG, de Brunswick, editorializa: "Expertos advierten desde hace tiempo que el recurrir al Consejo de Seguridad puede hacer cerrar aún más las filas entre los extremistas islámicos. No obstante, no se puede acusar ni a Occidente ni a Rusia ni a China de haber realizado pocos esfuerzos diplomáticos. Si se renunciara ahora a la última herramienta de presión, la condena por parte del Consejo de Seguridad, se perdería toda credibilidad."

Un mix político-económico

El OSTSEE-ZEITUNG, de Rostock, opina: "Probablemente sólo una mezcla de elementos económicos y políticos, como por ejemplo instalaciones de enriquecimiento de uranio en Rusia, pueda evitar lo peor. Ahora el presidente iraní debe recurrir a su inteligencia. ¿Podrá ayudar a ello la ONU?"