Irán lanza misiles contra sede del EI en el este de Siria
19 de junio de 2017
Los Guardianes de la Revolución de Irán lanzaron misiles contra una sede del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la provincia siria de Deir al Zur, en el este, donde murieron un número indeterminado de yihadistas.
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El bombardeo iraní con misiles a una base del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en el este de Siria fue un "éxito" y logró destruir centros de mando de los yihadistas, anunciaron este lunes (19.06.2017) los Guardianes de la Revolución de Irán.
El portavoz de este cuerpo de elite, el general Ramezan Sharif, explicó en un comunicado que además de aniquilar centros de mando, también se destruyeron almacenes de armas del EI en la provincia siria de Deir al Zur.
Los misiles de tipo tierra-tierra y de medio alcance fueron disparados el domingo desde las provincias iraníes occidentales de Kermanshah y Kurdistán, informó el cuerpo de elite en un comunicado.
Este ataque, el primero efectuado desde Irán, es la respuesta al doble atentado reivindicado por el EI en Teherán el pasado día 7 contra el Parlamento y el mausoleo del imán Jomeiní, que causó 17 muertos y decena de heridos.
"Gran número de terroristas abatidos"
Según los Guardianes de la Revolución, "un gran número de terroristas" fueron abatidos en el bombardeo, que destruyó también armamento, municiones y equipamientos del EI.
El cuerpo de elite iraní aseguró en la nota, difundida por su página Sepah News, que "el derramamiento de sangre inocente no quedará sin respuesta" y que Irán "no escatimará esfuerzos para defender su seguridad nacional".
La República Islámica de Irán apoya al régimen sirio de Bashar al Assad en su lucha contra el EI con asesores militares y milicianos chiíes sobre el terreno, pero hasta ahora no había realizado ataques desde su propio territorio.
CP (efe, dpa)
Siria: así resiste Duma ante la guerra
Desde octubre de 2013, las tropas de Bashar al Assad asedian Duma, ciudad muy cercana a Damasco. Los bombardeos aéreos y por tierra no permiten que los ciudadanos tengan una vida normal.
Imagen: DW/F. Abdullah
Marcados por la guerra
La ciudad de Duma se halla a 13 kilómetros al noreste de la capital siria, Damasco, en la región Guta Oriental. Los rebeldes controlan la zona, que es considerada una de las más disputadas de la guerra siria.
Imagen: DW/F. Abdullah
Juegos de guerra
Los bombardeos sirios y rusos han destruido varios barrios, algunos casi por completo, de la ciudad de Duma en los últimos años. La necesidad lleva a los niños a utilizar los edificios y hogares destruidos como un peligroso terreno para sus juegos.
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Aprendiendo bajo el suelo.
Debido a los bombardeos, la mayoría de las escuelas y otras instituciones oficiales se han trasladado al subsuelo. La educación es para las futuras generaciones, que ahora están viviendo en guerra, de suma importancia, ya que el país dependerá de elllas el día de mañana.
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La guerra no descansa
Después de que su casa fuese destruida por una bomba, un hombre busca sus pertenencias entre las ruinas. Sobre su cabeza siguen sobrevolando los aviones de combate. Desde hace años, el gobierno sirio intenta ganar de nuevo el control de la ciudad de Duma a través de bombas barriles y misiles tierra-aire.
Imagen: DW/F. Abdullah
Panaderos artesanales
Sin gasolina y sin harina: las máquina industriales para hacer pan ya no funcionan. Ahora se practica una antigua tradición siria: hornear el pan con las manos. Los ciudadanos han abierto pequeños locales y venden una pieza de pan por 75 libras sirias, alrededor de 35 céntimos.
Imagen: DW/F. Abdullah
Electricidad de emergencia
Cuando se oculta el sol en Duma, se oye un ruido sordo que proviene de las tiendas y casas. Es que mucha gente usa generadores de electricidad para tener luz por las noches. Desde el asedio de la ciudad, los ciudadanos han tenido que aprender a vivir sin el abastecimiento de corriente eléctrica.
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Vivir con lo mínimo
Cosas tan comunes de la vida cotidiana, como planchar, durante la guerra se vuelven superfluas. Sin embargo, mucha gente intenta recuperar un poco de normalidad y se las arregla como puede para lograrlo. Como no hay electricidad, algunos usan la antigua plancha a carbón caliente.